Musicales sobre las vidas de Serrat y Queen, teatro con artistas como Emilio Gutierrez Caba o un homenaje a Beethoven en el 250 aniversario de su nacimiento ocuparán el cartel del Teatro Auditorio de Cuenca para los próximos tres meses.
Este martes se ha llevado a cabo la presentación de la oferta cultural del «buque insignia cultural» de la capital conquense, tal y como ha declarado el alcalde Dario Dolz, quien ha explicado que el reto para este 2020 es «mejorar la oferta cultural de la ciudad y seguir buscando espectáculos de calidad».
Así, el concejal de Cultura, Miguel Ángel Valero, ha explicado que algunos de los platos fuertes para el invierno de este 2020 son la presencia de los musicales «Mi madre, Serrat y yo» el 30 de enero, que estará interpretado por la actriz conquense Cristina Esteban, o la obra ‘»We love Queen», dirigida por Yllana, que tendrá lugar el 31 de este mes.
También se subirán a las tablas del teatro auditorio el mago Yunque, el reconocido actor Emilio Gutiérrez Caba con la obra «Copenhague» el 7 de febrero o un amplio homenaje a Beethoven en el 250 aniversario de su nacimiento con la representación de varias sinfonías y la opera «Cristo en el monte de los olivos».
También habrá ópera y es que llegará a Cuenca el montaje de «La Boheme» de Puccini que dirigirá la Orquesta Nacional de Moldavia. También habrá actuaciones para los más pequeños: «La ChicaCharcos» y más teatro con la obra de Francisco de Rojas «Entre bobos anda el juego» adaptada por Yolanda Pallín.
También volverán este invierno el Festival D’palabra, organizado por la Fundación Cultura Ciudad de Cuenca, y se apostará por la vuelta de monólogos de humos a partir de la próxima primavera.
Por otro lado, el alcalde ha anunciado que durante el pasado 2019 un total de 70.500 personas acudieron a alguno de los 197 eventos en los que participó la Fundación Cultura Ciudad de Cuenca.
También ha anunciado que a partir de este 2020 el Ayuntamiento quiere abrir las puertas del auditorio a todos los colectivos culturales de la capital «para darles así la capacidad de que si quieren reflejar su arte en el auditorio de la capital puedan hacerlo sin ningún problema».