El alcalde de Cuenca, Darío Dolz, ha avanzado que ya se está ultimando un proyecto de presupuestos municipales para el presente ejercicio que, si bien aún está sometido a plan de ajuste, llega con «más capacidad inversora» que en otras ocasiones.
En una entrevista con Europa Press, Dolz ha indicado que espera tener los presupuestos en el primer trimestre, al tiempo que ha puesto en valor la novedad de contar con la participación ciudadana en su diseño.
«La ciudad necesita otro impulso y otras inversiones, actuaciones de mantenimiento urbano conjugado con fondos del Plan Edusi. Veremos otras realidades de cara a esta anualidad en la ciudad con arreglos y puesta en servicio de nuevas infraestructuras», ha detallado.
El primer edil conquense se ha referido al futuro Plan de Ordenación Municipal (POM), confiado en que en el corto plazo pueda estar a disposición un texto preliminar.
Este nuevo POM, «necesario para despejar incógnitas», tendrá como «parámetro fundamental» la generación de suelo industrial, tal y como indicado Dolz.
En este punto, ha anunciado que este plan urbanístico contemplará dos nuevas zonas industriales, aún por desvelar, para favorecer la atracción de empresas a la capital conquense.
Intercambiador en la antigua estación
En el apartado de movilidad, Dolz se ha referido al futuro diseño de las líneas de autobús, toda vez que en el año 2022 termina la concesión administrativa vigente.
En esta línea, el alcalde ha considerado que habrá que prestar especial atención en el nuevo diseño a dar más cobertura a barrios «que están cogiendo fuerza» y actualmente no están bien atendidos.
Como premisas para las futuras líneas, se estudiarán las conexiones con el nuevo hospital, se mejorarán las que hay con la estación del AVE y se plantearán líneas circulares «o de anillos concéntricos» para «dar una mejor cobertura al entorno de la ciudad».
Dolz ha reparado en la idea de dar forma a un intercambiador en la antigua estación de Renfe, algo que ha reconocido que «se está estudiando con buenos ojos», si bien no se ha concretado.
Sobre los accesos al Casco Histórico y la eliminación de cámaras de control de tráfico a principio de legislatura y la falta de control de aparcamiento de vehículos sin permiso, Dolz ha recordado que la medida fue adoptada tras conversaciones con varios colectivos, si bien ha reconocido que se van a reforzar los mecanismos para controlar el estacionamiento de coches sin autorización, algo que se hará «con medios propios», Policía Local y agentes de movilidad.
En todo caso, ha manifestado que no se recuperará el control de acceso a través de las cámaras instaladas, que siguen funcionado pero a efectos de medición estadística para auditar el tránsito de vehículos.
La conexión con el Casco se seguirá estudiando a través del servicio de lanzadera con el que se experimentó semanas atrás. «Fue una medida bien acogida por usuarios y vecinos y a la empresa concesionaria le ha gustado. Ahondaremos en ella para hacer una ciudad sostenible, lo cual pasa por dejar el coche en casa y tener un transporte urbano más adecuado».
En este contexto, Darío Dolz ha rechazado ampliar el parking del Castillo, algo que sería «una contradicción», toda vez que serviría para «incentivar más subir al Casco con el coche particular».
«No nos vamos a mover para propiciar una zona de aparcamiento que sirva como efecto llamada para subir con el coche particular», ha zanjado, recordando que el Ayuntamiento sigue explorando alternativas como los remontes mecánicos al Casco.
Zonas de ocio en la Resinera y los terrenos de Adif
En plena polémica por el cerramiento y vallado del parking «alegal» en el antiguo Camino de la Resinera obligado por el contrato suscrito con la empresa impulsora del aparcamiento recién inaugurado en la calle Astrana Marín, Darío Dolz ha avanzado que esta zona, calificada como verde, se dedicará a implementar «actividades de ocio».
Tras recordar que este cerramiento viene derivado de las condiciones pactadas con la empresa del parking por parte el anterior equipo de Gobierno del PP, ha indicado que varías concejalías ya trabajan «para dar contenido a este espacio con la mayor rapidez posible» para que la zona pueda ser «disfrutada» por los conquenses.
En la línea de abrir más espacios dedicados al ocio, Dolz ha hecho referencia a la brecha que suponen los terrenos de Renfe. Toda vez que ya hay interlocutor válido al frente del Ministerio de Fomento tras formarse el Gobierno a nivel estatal, habrá que avanzar en las conversaciones, si bien el alcalde ha deslizado que algunos de los inmuebles de la zona podrían reconvertirse en espacios culturales y abiertos a la ciudadanía.
Ha recordado que el ministro con competencias, José Luis Ábalos, se comprometió a implicarse personalmente en resolver «esa cicatriz» de la ciudad. Ahora toca esperar a que el Ministerio dé forma a su estructura antes de empezar a programar reuniones de trabajo para abordar el tema.
Aunque prefiere plantear en primer lugar sus sugerencias al ministro, sí ha avanzado que la propuesta pasará por «ganar espacio para terrenos ociosos», con zonas abandonadas que en la actualidad «son fuente de conflicto», focos de suciedad y susceptibles de incendios.
«Hay que ganar territorio para la ciudad de Cuenca. Estoy pensando en poner en valor los edificios que tiene ese espacio como futuros contenedores culturales. Esa será la petición», ha aseverado.