La alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, ha recalcado que el bolseo es la «única opción» factible en algunas zonas del Casco Histórico y ha dejado claro que la recogida selectiva de residuos es «una prioridad» para el equipo de Gobierno, algo que se verá reflejado en el nuevo contrato del servicio de recogida de basura y limpieza viaria.
Así se ha pronunciado Tolón sobre este asunto a preguntas de los periodistas después de que el Partido Popular asegurara este lunes que «dará la batalla» junto a los vecinos de esta zona de la ciudad, que han iniciado una campaña de recogida de firmas en favor del reciclaje, contra el bolseo.
La regidora toledana ha asegurado que el nuevo pliego persigue «ir hacia la excelencia en la recogida de basura» en todos los barrios de la capital de Castilla-La Mancha, si bien ha admitido que la situación del Casco Histórico es diferente por su orografía.
A este respecto, ha defendido el bolseo como «única opción» para algunas zonas antiguas del Casco, donde «no se pueden introducir contenedores», debido a que «los camiones no podrían circular por algunas calles y chocarían con la parte monumental».
En cualquier caso, ha hecho hincapié en la necesidad de «compatibilizar» el bolseo con la recogida selectiva y ha lamentado las críticas de los «populares», dado que «el pliego actual se aprobó en época del PP y no se tenían en cuenta ciertas zonas de la ciudad».
Preguntada por las cuestiones tratadas en el Pleno de la Comisión Nacional de Administración Local, celebrado este lunes en Madrid, Tolón, a la sazón vicepresidenta de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), ha indicado que se abordaron temas que los ayuntamientos llevan tiempo esperando.
Entre ellos, la necesidad de que las administraciones locales tengan una «financiación paralela» a la de las comunidades autónomas, para que «no nos dejen las sobras», y la importancia de «flexibilizar» las inversiones financieramente sostenibles.
A propósito de estas cuestiones, ha apuntado que los consistorios son los que «hacen posible que España pueda cumplir con sus objetivos dentro de la Unión Europea» a pesar de que soportan «competencias impropias», ya que «pagan labores que corresponden a las regiones» en materia de educación y servicios sociales.