martes, 26 de noviembre de 2024
18/03/2013junio 13th, 2017

El Ayuntamiento de Trillo (Guadalajara) inauguró las nuevas instalaciones del campo de El Robledal. Cerca de 300 niños, en las categorías alevín y benjamín, jugaron en los dos campos de futbol siete en los que quedó dividido en terreno de juego.

La competición hizo un pequeño parón a las 13:30 horas. Tomó entonces la palabra Francisco Moreno, alcalde de Trillo. El regidor le dio la bienvenida a los presentes, en torno al millar de personas, venidas de Guadalajara y Madrid, lugar de procedencia de los equipos, que se habían desplazado a Trillo con motivo de la disputa del Trillo Cup. 


El alcalde enmarcó las nuevas instalaciones del campo «en el programa de mejora de servicios e infraestructuras que  Ayuntamiento de Trillo ha puesto en marcha». Después cedió el protagonismo al párroco local, Santiago Jiménez, que dijo unas palabras y roció con agua bendita el césped del campo.

A renglón seguido el concejal de Deportes, Hugo Pérez, y el propio Moreno descubrieron la placa conmemorativa que recuerda el día de la apertura de las instalaciones. Distintas personalidades locales y provinciales estuvieron presentes en el acto. Javier del Río, diputado provincial de Deportes, acompañó al Ayuntamiento de Trillo en la apertura.

Hugo Pérez dirigió unas palabras de agradecimiento a todos los componentes del CD Trillo, que se han involucrado en la organización del Torneo “antes y durante su celebración”, y a los trillanos, que “nos han parado en estos días por la calle para ofrecerse como voluntarios en todo aquello que nos hiciera falta”. Pérez hizo entrega de un detalle a los trillanos Miguel Romón y Santiago Rivalda, directivo y entrenador del Sporting Hortaleza y Atlético de Madrid respectivamente.

Por último, y por decisión de los integrantes del CD Trillo, la viuda y la familia de Pedro Henche, que fuera muchos años presidente del club y gran valedor del fútbol en la localidad, tristemente fallecido el año pasado, recibieron una placa, una camiseta dedicada del club y un ramo de flores. “Seguro que, desde donde nos esté viendo, estará hoy feliz viendo el campo de El Robledal lleno de chavales jugando al fútbol como los ángeles”, terminó Hugo.

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