El Gobierno de Castilla-La Mancha ha puesto en marcha el Plan Respira, una nueva estrategia dirigida a la prevención y control del tabaquismo que se desarrollará mediante la aplicación por parte de la Consejería de Sanidad y del Sescam de dos bloques de actuaciones principales: medidas de prevención y un plan de atención sanitaria para la cesación tabáquica que incorpora la terapia farmacológica financiada ligada a la participación en terapias individuales o grupales.
Así lo han indicado este viernes en rueda de prensa el director general de Salud Pública de la Consejería de Sanidad, Juan José Camacho, y la directora general de Atención Primaria del Sescam, Natalia Valles, durante la presentación de las acciones incluidas en este Plan, que se enmarca dentro del Plan de Salud de Castilla-La Mancha 2019-2025, ha informado la Junta en nota de prensa.
Un 34,7 por 100 de fumadores, 12,7 cigarros al día…
Tal y como ha explicado Camacho, el informe del Observatorio para las Drogodependencias de Castilla-La Mancha del año 2018, recoge que el tabaco, es tras el alcohol, la droga más consumida en nuestra comunidad autónoma. El 68 por ciento de la población ha fumado tabaco alguna vez en su vida, un 40,6 por ciento ha fumado en el último año, un 38,4 por ciento ha fumado en los últimos 30 días y a diario lo hacen el 34,7 por ciento, datos similares a nivel nacional. El número medio de cigarrillos fumados al día se sitúa en 12,7, muy semejante a la media nacional.
Para abordar esta realidad, la Consejería de Sanidad ha diseñado un plan de atención sanitaria para la cesación tabáquica, con perspectiva de equidad, cuyas líneas estratégicas operativas se basan en tres pilares: la profundización en el abordaje integral de la prevención del tabaquismo con la participación y colaboración de todos los agentes implicados, la sensibilización y formación de los profesionales sanitarios en la detección y tratamiento del hábito tabáquico y la financiación de los tratamientos farmacológicos aprobados por el Ministerio de Sanidad, como apoyo terapéutico en los casos indicados.
Según ha explicado Valles, un grupo técnico asesor-experto, coordinado por la Dirección General de Salud Pública e integrado por profesionales del Sescam, ha elaborado una Vía Clínica para la Deshabituación Tabáquica en Castilla-La Mancha, en base a la cual se ha establecido un nuevo programa de despistaje de tabaco y un protocolo para la cesación tabáquica tanto en Atención Primaria como Hospitalaria, ambos disponibles desde hace unas semanas, tras las correspondientes adaptaciones, de los programas informáticos Turriano, Mambrino y Fierabrás.
Como continuación y complemento del trabajo del grupo asesor, se constituirá un Comité de Seguimiento del Plan Respira, con participación de sociedades científicas, colegios profesionales, movimiento asociativo ciudadano, administraciones y el resto de agentes implicados en el mismo.
Una estrategia formativa triple
En cuanto a la sensibilización y formación de los profesionales, fundamentalmente de Atención Primaria, se llevará a cabo a través de una triple estrategia. Por un lado, entre el 3 y el 10 de marzo se van a desarrollar nueve ediciones simultáneas, con aproximadamente cien alumnos y dos tutores por cada una de ellas, a través de la plataforma de formación SOFOS, de un curso sobre la Vía Clínica de Deshabituación Tabáquica de Castilla-La Mancha y su aplicabilidad a través de las herramientas de uso diario en sus consultas.
Por otra parte, en el segundo trimestre del 2020 se iniciará una formación más específica sobre tabaquismo, con la programación de cinco cursos con una modalidad mixta (online-presencial) y una duración total de 75 horas, que será impartida por profesionales sanitarios expertos en tabaquismo.
Y, finalmente, en el último cuatrimestre del año se iniciará la primera edición de formación en expertos de tabaquismo, que se desarrollará en modalidad presencial en el ICS de Talavera de la Reina.
Terapias farmacológicas
De otro lado, y ligado al programa de despistaje y al protocolo para la cesación tabáquica, el plan incorpora la financiación de los tratamientos farmacológicos aprobados por el Ministerio de Sanidad en base a las instrucciones aprobadas y publicadas el día 23 diciembre de 2019, –vareniclina y bupropion–, para lo cual ha sido necesario adaptar la herramienta de receta electrónica.
Para el acceso a la financiación de estos fármacos, el paciente ha de estar incluido, como requisito imprescindible, dentro del programa de deshabituación tabáquica de Castilla-La Mancha, manifestar una motivación expresa para dejar de fumar, haberlo intentado en el último año y tener un alto grado de dependencia, requisitos todos ellos establecidos en las instrucciones emitidas por el Ministerio, donde también se contempla que sólo se financiará un tratamiento completo al año.
Cualquier castellano-manchego que quiera dejar de fumar con ayuda de los profesionales sanitarios se ha de dirigir a su centro de salud de referencia y solicitar una consulta.
El plan también incluye medidas de prevención
En relación a las medidas de prevención, el Plan Respira incluye la implementación de un bloque de actuaciones, entre ellas, el análisis de las diferentes encuestas y estudios sobre tabaquismo a nivel regional para proponer acciones de prevención y control que respondan a las diferentes necesidades existentes de nuestra ciudadanía, teniendo en cuenta los ejes de equidad (edad, género, clase social, etnia y otros) y con enfoque de curso vital (embarazo, parentalidad, etc).
Asimismo, se promoverán acciones de sensibilización a la población general y grupos específicos, a través de la realización o participación en jornadas, reuniones y otros eventos de interés, como puede ser el Día Mundial sin Tabaco y Salud Pulmonar que se celebra cada año el 31 de mayo, y que vendrá precedido de una semana de actividades específicas, bajo el lema ‘Castilla-La Mancha Respira’.
Además, se programarán actividades donde tendrá acogida la participación de sociedades científicas, asociaciones de pacientes, colegios profesionales, administraciones locales, etc. En esa misma línea, se pondrá en marcha un plan de comunicación sobre los riesgos del consumo tabáquico, con presencia en medios y redes sociales.
Igualmente, se incidirá en el desarrollo de campañas de sensibilización frente al tabaquismo dirigidas a la población joven, así como la promoción y coordinación de programas educativos de prevención del tabaquismo en Educación Primaria y Secundaria dirigidas a padres y madres, que incluirá también acciones sobre los dispositivos susceptibles de liberación de nicotina. Para ello, durante el segundo trimestre del 2020, se iniciarán reuniones con la Consejería de Educación, Cultura y Deportes.
Por otra parte, la Consejería de Sanidad colaborará con el concurso europeo de «Clase sin humo», promovido por la Sociedad Castellanomanchega de Medicina de Familia y Comunitaria (Scamfyc), para la prevención del tabaquismo y que se desarrolla en los dos primeros cursos de la ESO.
El concurso se basa en el compromiso colectivo de toda la clase de mantenerse sin fumar durante el curso escolar y en la responsabilidad y confianza mutua de todos, alumnos y profesores. Durante el curso 2018/19, han participado un total de 49 centros en Castilla La-Mancha, 124 aulas, 3.434 escolares y 124 profesionales de la educación.