El Gobierno de Castilla-La Mancha da por zanjada la guerra del agua con el plan de cuenca del Tajo que ha elaborado el Ministerio de Agricultura y que cuenta con el beneplácito de CLM y Murcia.
Así lo ha explicado el consejero de Presidencia, Leandro Esteban, quien ha destacado la labor de la presidenta, María Dolores de Cospedal, en las negociaciones que han dado como fruto el plan cuyo borrador dio a conocer ayer el Ministerio de Miguel Arias Cañete.
El acuerdo para el plan del Tajo, que también ha sido bendecido por Murcia, “pone a CLM en la senda del futuro y zanja y cierra la guerra del agua que nunca debería haber existido”, afirmó el consejero, quien agregó que “es de nuevo un Gobierno del PP el que pone encima de la mesa la solución para el problema del agua en Castilla-La Mancha y en nuestro país”.
La consejera de Fomento, Marta García de la Calzada, ha sido la encargada de dar a conocer todos los detalles en la reunión que esta mañana ha celebrado el Consejo de Gobierno de CLM. Sobre el citado plan, Esteban ha destacado que la “valoración no deja lugar a dudas”, porque gracias a la “gestión de la presidenta Cospedal en este asunto se garantiza agua en cantidad y calidad suficiente para Castilla-La Mancha”.
En este sentido, agregó que “la presidenta, de manera destacada e importante, ha llevado a cabo negociaciones y ha participado en la tramitación del plan, y a ella hay que felicitarla en primer lugar”.
ABASTECIMIENTO EN SEQUÍA PARA UN MILLÓN DE PERSONAS Y NUEVAS HECTÁREAS DE REGADÍO
“CLM tiene garantizada agua en calidad y cantidad; por lo tanto, no tiene ya hipoteca sobre su futuro”, dijo también Esteban, que destacó que el nuevo plan de cuenca del Tajo incorpora una reserva mínima que garantizará las necesidades del futuro, así como garantiza el abastecimiento en tiempos de sequía a más de un millón personas en CLM y garantiza el desarrollo región de 158.000 nuevas hectáreas de riego”.
El consejero de Presidencia y portavoz del Gobierno también ha destacado la importancia del Plan para Talavera, ciudad que, según sus propias plabras “había sido la gran olvidada” y ahora “recupera su río, elemento esencial para la segunda ciudad en habitantes en Castilla-La Mancha”.