El Gobierno de Castilla-La Mancha ha felicitado, a través del consejero de Hacienda y Administraciones Públicas, Juan Alfonso Ruiz Molina, a todos los profesionales del ámbito de la Protección Civil por el esfuerzo que realizan, del que el Ejecutivo autonómico está «orgulloso».
Día Internacional de la Protección Civil
En un artículo de opinión que ha enviado con motivo de la celebración este domingo, 1 de marzo, del Día Internacional de la Protección Civil, Ruiz Molina ha afirmado: «Desde el Gobierno regional nos sentimos sumamente orgullosos del trabajo realizado por todos los profesionales implicados en el ámbito de la Protección Civil» .
Asimismo, ha indicado que «hoy, en el Día Internacional de su campo de trabajo, queremos enviarles nuestra más sincera felicitación por su esfuerzo», al tiempo que ha trasladado a la ciudadanía un mensaje de tranquilidad porque, según ha recalcado, «siempre que se les necesite, ellos estarán preparados para intervenir».
Ruiz Molina ha apuntado que «en la lengua castellana tenemos un prolijo refranero que nos ofrece en pocas palabras claves esenciales», y ha precisado que «uno de los refranes más populares en nuestra tierra, que seguro en algún momento hemos escuchado pronunciar a nuestros padres o abuelos, con la voz de la experiencia, es aquel que dice: más vale prevenir que curar».
La prevención
Y, en este contexto, ha señalado que «precisamente la prevención para implantar aquellas medidas que se consideran oportunas para reducir los riesgos y posibles daños que se derivan de las situaciones de calamidad pública o catástrofe extraordinaria es una de las principales funciones de la Protección Civil, cuyo Día Internacional se conmemora hoy»
Según Ruiz Molina, esta prevención con carácter previo a esa posible situación de catástrofe «debe ir acompañada de previsión», para analizar los supuestos de riesgos y sus causas y efectos, así como de planificación, «a fin de establecer las líneas de actuación a llevar cabo para hacer frente a los daños que pudieran producirse».
Estas labores se complementan con la intervención para proteger la vida de las personas y la integridad de los bienes y del medio natural cuando se producen estas situaciones catastróficas e, inmediatamente, de la rehabilitación para recuperar la normalidad, ha añadido Ruiz Molina.
«Un servicio público»
Para ello se desarrolla un conjunto de actuaciones, en gran parte preventivas, «que constituyen un servicio público», en el que es fundamental la colaboración y coordinación de todas las administraciones públicas, ha destacado el titular de Hacienda y Administraciones Públicas.
El consejero ha asegurado que «desde el Gobierno regional estamos plenamente comprometidos con ese trabajo previo, que hay que llevar a cabo día a día, sin titulares de prensa y que es el único que puede garantizar la minoración de los riesgos cuando sobrevienen situaciones en las que se puede poner en peligro la vida de las personas».
Y ha señalado que «para ello, trabajamos en el establecimiento de protocolos operativos con otras entidades y administraciones públicas y, en el caso de los ayuntamientos, contribuimos a su labor en la materia a través de las subvenciones que, con carácter anual, convocamos para que estos puedan elaborar sus respectivos planes de protección civil de ámbito municipal».
«Coordinación»
Además ha recordado que «en coordinación con ellos y con todos los grupos de intervención en situaciones de emergencia organizamos de forma periódica diferentes simulacros, que nos sirven para analizar nuestra capacidad de respuesta y corregir cualquier posible deficiencia que se pueda detectar en la cadena de actuaciones para ofrecer respuestas rápidas, eficientes y coordinadas a las situaciones de emergencia».
«En definitiva, diferentes líneas de trabajo que realizamos con el convencimiento de que llevarlas a cabo de manera preventiva es la mejor garantía para asegurar la protección de la ciudadanía en situaciones de riesgo», ha remarcado el consejero.
Ruiz Molina ha agregado que «así se ha demostrado con las diferentes emergencias que se han producido en los últimos años en la región», en las que se ha puesto en práctica toda esa labor previa, que ha permitido ejecutar un trabajo coordinado entre las diferentes administraciones públicas implicadas y los múltiples grupos de intervención, y cuyo resultado ha sido una minoración de los efectos negativos de esas situaciones catastróficas».