Los delegados del Gobierno regional en las provincias de Albacete y Ciudad Real, Javier Cuenca y Antonio Lucas-Torres, respectivamente, han visitados zonas afectadas por las lluvias de las últimas jornadas y han destacado la coordinación que ha habido entre las administraciones.
El delegado en Albacete ha visitado el municipio de La Herrera y ha recorrido zonas, como La Gravera, La Choriza y la inmediaciones del trasvase Tajo-Segura, que se han visto afectadas por las crecidas del río Jardín.
Asimimo, Lucas-Torres ha visitado el caudal del río Azuer a su paso por Daimiel junto al alcalde de este municipio, Leopoldo Sierra, según ha informado la Junta.
Cuenca ha dicho que las lluvias de marzo han ocasionado menores daños que las tormentas, pedriscos o sequía del año pasado, y ha precisado que las primeras estimaciones de los técnicos de Agricultura cifran en un centenar las hectáreas afectadas de cereal y otras ochenta de ajo.
Las precipitaciones caídas en marzo en Albacete han sido las más elevadas de los últimos treinta años y triplican, además, la media de la serie histórica que maneja la Consejería de Agricultura desde 1980.
El delegado de la Junta en Albacete ha subrayado el esfuerzo de la Junta para concienciar a los agricultores y que aseguren las rentas del campo.
Por su parte, delegado de la Junta en Ciudad Real ha enviado un mensaje de tranquilidad a los vecinos y ha recordado que durante todo este fin de semana continuará activo en fase de alerta el plan especial ante el riesgo de inundaciones en la provincia.
Ha dicho que un primer balance provisional de daños ocasionados por las lluvias realizado por la Consejería de Agricultura recoge que se ha visto afectada el dos por ciento de la superficie agraria y ganadera de Castilla-La Mancha.
En Ciudad Real, los principales cultivos dañados son los cereales, aunque también hay parcelas inundadas de viñedo, ajo y cebolla.