Nunca había vivido un día de cumpleaños así. Tenía miedo, pensaba que iba a ser un día triste, con mis niños y Mónica aquí y sin poder darnos un abrazo, sin regalos, sin visitas, sin poder salir a comer por ahí o tomar algo con mis amigos.

Uno de los cumpleaños más especiales de mi vida

Menos mal que una vez más me equivoqué. Creo que ha sido uno de los cumpleaños más especiales de mi vida. Mensajes, llamadas, redes sociales, imágenes, videos y hasta algún regalo material. Pero en este caso, no importa el valor, porque los regalos que he recibido no tienen precio.

El día comenzó con un vídeo increíble de mi amiga Inma Bañegil. Inma es capaz de convertir mis sueños en pintura, de llevar lo de mi cabeza al papel o a su ordenador. Nadie es capaz de interpretar mis pensamientos como ella, pero lo mejor es que es mi amiga; sin duda, eso es lo mejor.

El vídeo comenzaba con una imagen que me encanta, el símbolo del infinito con ojos como si fuera una máscara de un auténtico superhéroe. El resto os lo dejo en este vídeo para que lo podáis ver, junto a la música de mi canción favorita, «Viva la vida».

Después me tocó llorar. Un montón de gente, de muchos lugares distintos, unidos para hacer un vídeo que me pone los pelos de punta. Ver a mi hermano Julio y Ana desde Australia, a mis tíos desde Barcelona, a mi familia y a un montón de amigos unidos para hacerme un regalo, que como decía al principio no tiene precio.

Sé que falta mucha gente, que os hubiera encantado estar y a mí que estuvierais, pero no os preocupéis, porque sé que estabais. Te pido, a ti que me lees, que lo veas, seguro que te emocionas.

Dos vídeos más llegaron a largo de la mañana. El de mis amigos y el de mis compañeros del Ayuntamiento. Dos vídeos para reír, con anécdotas, tomas falsas… Realmente, lo que perseguían fue conseguido, me llegaron al corazón y eso solo lo logran las personas que pueden y no las que quieren.

Vi incluso parte de mi discurso del Día de Castilla-La Mancha, que nunca había visto. Cómo se emocionó y vibró Manolo García, frases que dije, caras que puse,…

Desde La Roda hasta el infinito y mas allá

Son muy largos para compartirlos, pero os dejo una muestra que seguro os gusta.

Desde Yakarta a Alicante, desde Madrid a Albacete, desde La Roda hasta el infinito y mas allá. Así os quiero yo amigos y amigas.

El mensaje de Page y el violín de Felpeto

Al largo del día recibí cientos de mensajes y no me atrevería a decir cuál es importante o no, seguramente todos lo son. Recibí mensaje del presidente, de muchos consejeros, de mi jefe en la consejería, Angel Felpeto, tocando cumpleaños feliz con su saxo y confesando que era la primera vez que lo hacía (os lo cuento porque ya me avisó que no pusiera el vídeo, jejeje), de diputados, de gente que he conocido en estos últimos años, de gente de toda la vida.

Mensajes de gente que esperaba y de gente que ni siquiera esperaba. Pero también hay mensajes que esperaba y que no llegaron. Es como la vida misma, eso no cambia con el coronavirus.

Soy una persona afortunada al recoger tanto cariño

Siento muchísimo a quien no he respondido o correspondido como merece. En estos días intentaré ir contestando a todos y todas. Para que os hagáis una idea, al acostarme tenía 205 conversaciones abiertas en WhatsApp, muchísimos mensajes en messenger, en Instagram, muchas etiquetas en Facebook y puse un mensaje genérico de agradecimiento que esta mañana tiene 221 comentarios. Es difícil, pero si algo tengo por delante, es tiempo.

El cariño no se compra ni se vende y me confieso una persona afortunada de recoger tanto cariño. Yo intento sembrar todo lo que puedo, pero estoy convencido de que recojo muchos más de lo que merezco.

Cumpleaños feliz a Amores desde el balcón de sus vecinos

Ayer salí al balcón, os confieso que no salgo casi nunca. Pero me dijeron que me iban a dedicar una canción después del aplauso a nuestros héroes. Es increíble ver a mis vecinos y vecinas demostrándome su cariño a través de sus balcones. Muchísimas gracias, en especial a nuestro DJ vecinal particular «patojillo». Me encantó.

Tuve tarta, congelada, pero tuve tarta. Soplé las velas, que tanta ilusión hace a mis niños. Tuve regalos, gracias a la maravillosa mujer que tengo. Como por arte de magia recibí hasta un regalo que salía en el vídeo de mi amigo Chiqui. Una taza que veréis muy a menudo cerca de mí. No podía esperar nada mejor de una persona que es magia.

Lo que pintaba como un día triste se convirtió en un día muy feliz. Conforme pasan los años escucho a la gente decir que no quiere cumplir tantos y yo siempre digo: «Yo lo que quiero es cumplir muchos más». Gracias por regalarme un día increíble en mi 43 cumpleaños.

¡Voy a ser tío!

Y si el día estaba siendo increíble, terminó de la mejor manera posible. Os decía recientemente que la vida se abre camino y ayer mi hermano David y Belén me daban en primicia la noticia de que voy a ser tío. Ha costado mucho, pero siempre llega, porque la vida es maravillosa a pesar de las pruebas tan duras que nos pone.

Se me cae la baba y les pedí un rato para decir la noticia a los demás, porque hoy saldría en mi balcón. En momentos tan tristes, ¡qué bonito es recibir esta gran noticia! Te espero con los brazos abiertos sobrino o sobrina. Y a los papás, qué mas puedo decir… Os quiero con locura.

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