La Guardia Civil, en el marco de la operación Rajal, detuvo a dos personas de 35 y 36 años de edad por delitos contra la salud pública de tráfico de drogas y cultivo o elaboración de estupefacientes, así como otro delito de defraudación del fluido eléctrico, cometido en la localidad de Lucillos, en la provincia de Toledo, tal y como han señalado en una nota de prensa.
La Guardia Civil de Cebolla detectó, en varias ocasiones, un fuerte olor característico a las plantaciones de marihuana en las inmediaciones de una calle de la localidad de Lucillos.
El olor les llevó a una vivienda alquilada por dos personas
Por lo que procedieron a realizar gestiones para localizar el origen del olor, estableciendo servicios específicos y, tras numerosas indagaciones llegaron hasta una vivienda ubicada en este municipio, que estaba alquilada por dos hombres.
Tras solicitar al juez autorización de entrada y el registro de la vivienda, halló 12 kilos de cogollos de marihuana, 1.802 gramos de polen de hachís, 29 gramos de hachís, 37 plantas de marihuana, 0,7 gramos de cocaína, 0,46 gramos de heroína, 5 pastillas de MDMA (éxtasis), así como 1.540 euros y 2 básculas y otros elementos para el embalaje de la droga.
La vivienda contaba con diversas zonas dedicadas específicamente a las diferentes fases del proceso: plantación indoor, zonas de secado, embasado y pesaje.
Un sofisticado sistema de iluminación, otro de centrifugado…
Los agentes comprobaron que esta plantación indoor de marihuana de alto rendimiento contaba con un sofisticado sistema de iluminación mediante led y riego, valorado en unos 75.000 euros, lo cual favorecía en gran medida la floración y crecimiento de las plantas. Igualmente tenían un sistema de centrifugado que extraía prácticamente el 100 por 100 del polen de la plantas.
Estas personas, que no tenían relación con el vecindario, permanecían de manera permanente en el interior de la vivienda, llegando a instalar un completo sistema de seguridad tanto en el exterior como en el interior de la vivienda, el cual permaneció activo incluso con la presencia de los agentes de la Guardia Civil.
Por lo que se aprehendieron las sustancias estupefacientes y detuvo a estos dos hombres por los presuntos delitos de tráfico de drogas, cultivo o elaboración de sustancias estupefacientes y defraudación de fluido eléctrico. Inmediatamente después fueron puestos a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Guardia de Talavera.
La Guardia Civil del puesto de Cebolla contó con el apoyo del Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Talavera y de otras patrullas de Seguridad Ciudadana de la comarca de Talavera.