El claustro de profesores del IES Brianda de Mendoza de Guadalajara ha enviado una carta, respaldada por el AMPA Claudio Pizarro y la Asociación de Directores de Institutos de Guadalajara, en la que denuncian la falta de medidas en los centros de enseñanza y prevén que habrá masificación en las aulas.
En la carta, remitida a los medios de comunicación, los docentes señalan que «a la incertidumbre sobre lo que va a suceder en los meses de verano, se une una verdad aún más inquietante: no se están tomando medidas efectivas para preparar a los centros educativos para reducir el riesgo de rebrote».
A su entender, «la falta de preparación «podía entenderse al comienzo», pero han denunciado que «tras tres meses y medio de trabajo a distancia, no hay excusa».
Los profesores se declaran alarmados
Han explicado que con esta misiva quieren hacer pública su alarma al conocer los datos de inicio de curso proporcionados en el claustro de profesores del 30 de junio, en el que se comunicó que en este centro escolar los alumnos de segundo de ESO «van a estar hacinados en clases de 33 alumnos, más el profesor, es decir, en grupos más numerosos que en el curso 2019-2020″
«En estas condiciones, será difícil respetar la distancia mínima de 1,5 metros entre personas», han advertido.
Esto significa, ha denunciado el cuerpo docente, que «no sólo no se están tomando medidas para mejorar las ratios alumnos/profesor de años anteriores y hacer más fuertes frente al coronavirus, sino que se están produciendo recortes de plantilla que conducen a una masificación peligrosa de las aulas».
Seis horas de convivencia diaria
Estos docentes han afirmado que desean volver a las aulas porque los dispositivos electrónicos no se pueden comparar con la enseñanza presencial, pero han recalcado que quieren hacerlo «de la manera más segura para el alumnado» y para sus propias familias.
A la Consejería de Educación le han preguntado «¿qué se va a hacer, aparte de señalizar pasillos, escalonar entradas y salidas o parcelar el patio en los recreos?», pues han incidido en que donde se convive seis horas todos los días es dentro del aula, donde llegará a haber hasta 33 alumnos.
«El profesorado y las familias de alumnos del IES Brianda de Mendoza nos negamos a ser cómplices de lo que consideramos un atentado contra la salud pública, además de la vulneración del derecho a una educación pública digna», ha finalizado la carta, en la que se asegura que otros centros de educación secundaria de la provincia les han hecho llegar «su preocupación, se encuentran en la misma o incluso en