Los pantanos de Entrepeñas y Buendía, en la cabecera del Tajo, han perdido en la última semana 18,24 hectómetros cúbicos y acumulan 684,89 hectómetros, lo que supone el 27,19 por ciento de su capacidad total de embalse, que alcanza los 2.518 hectómetros cúbicos.
Según los datos de la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT), a fecha de 3 de agosto de 2020, el embalse de Buendía acumula 323,81 hectómetros cúbicos de agua, 9,13 hectómetros menos que la semana pasada, lo que supone el 18,99 por 100 de su capacidad total, que es de 1.705 hectómetros cúbicos.
También la reserva de agua en el pantano de Entrepeñas ha bajado en 9,11 hectómetros cúbicos en los últimos siete días, de forma que almacena 361,08 hectómetros, el 44,41 % de su capacidad total, que se sitúa en 813 hectómetros cúbicos.
Hace un año por estas fechas los pantanos de la cabecera del Tajo almacenaban 537,85 hectómetros cúbicos, el 21,36 % de su capacidad de embalse.
En su totalidad, los pantanos de la cuenca hidrográfica del Tajo almacenan esta semana 6.149 hectómetros cúbicos de agua, 294 menos que la pasada semana, que suponen el 56,04 % de la capacidad total de embalse, que es de 11.051 hectómetros cúbicos.
150 hectómetros menos desde mayo
La situación en la cabecera comienza a ser preocupante, puesto que en los últimos meses el nivel de embalse ha descendido varios metros en ambos pantanos. De hecho, desde el 15 de mayo el descenso en hectómetros cúbicos ha sido de 146,85, aunque si nos remontamos al 1 de ese mes, la bajada sería de 149,46 hectómetros, o lo que es lo mismo, en solo tres meses han perdido el 18 por 100 del agua que había embalsada.
Y hay un factor determinante en estas abultadas bajadas: el trasvase Tajo-Segura, que desde que se reabriese en marzo ha enviado agua sin cesar hasta el Levante español. En las últimas semanas el caudal del trasvase ha sido de 26.000 litros por segundo.