Comenzó sus palabras citando al mismísimo Napoleón y comenzó diciendo que Fenavin «es una cita imprescindible para quien le gusta el vino. Porque estamos en el epicentro del mayor viñedo de España, de las tierras más emergentes de los caldos españoles».
La alcaldesa de Ciudad Real, Rosa Romero, hacía patria con el vino, «porque nos encontramos ante un sector fundamental de la economía nacional. Hay nada menos que 450.000 familias ligadas a esta actividad, de las que 100.000 son de Castilla-La Mancha».
De ahí que presumiera de que Ciudad Real y Fenavin «están estrechamente ligados. Sin la vid ni el vino no se entiende nuestra cultura occidental. Por lo tanto, ¿cómo no apoyar esta feria y cómo no felicitar a los organizadores?».
Y brindó por el éxito de Fenavin, «alzo mi copa simbólicamente y brindo por el éxito de la feria».
Porque, atención a esta idea que lanzó al final de su discurso: «Donde crecieron la vid y el vino crecieron la unión y la concordia; son palabras que necesitamos más que nunca».