No les quedó más remedio que inutilizarle de esta forma. La Policía Nacional tuvo que disparar en la pierna (un disparo en una zona no vital) a un ciudadano de 44 años el jueves 8 en Cuenca después de golpear con un hacha al vehículo de los agentes y tras amenazar con el mismo arma tanto a ellos como a los ciudadanos que iban por la calle.
Tal y como ha informado la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha, el hombre, que responde a las iniciales J.B.G., ha sido detenido como presunto autor de un delito de atentado, resistencia y desobediencia a los agentes de la autoridad.
Todo sucedió sobre las 23 horas, cuando la Policía fue avisada de que un hombre, armado con un hacha, estaba amenazando a los ciudadanos y golpeaba a los coches estacionados en la calle Fermín Caballero de la capital conquense.
Cuando llegaron los agentes comprobaron que el hombre mantenía una actitud muy violenta y alterada. De hecho, nada más hacer acto de presencia, se abalanzó contra el coche policial y lo golpeó con el hacha, haciendo caso omiso a las órdenes de los agentes.
Por lo que, tras numerosos avisos y tras dirigirse con el hacha hacia los policías, uno de éstos efectuó un disparo a una de las piernas del individuo, siempre en defensa de la seguridad de los ciudadanos y de su propia integridad. Sólo así pudo ser reducido y detenido, siendo trasladado de forma inmediata al hospital Virgen de la Luz, en Cuenca, con una herida en la pierna izquierda con orificio de entrada y salida que no resiste gravedad, donde quedó ingresado bajo custodia policial.