El pleno del Ayuntamiento de Azuqueca ha aprobado una nueva ordenanza municipal sobre «Seguridad y Convivencia» que endurece las sanciones por comportamientos incívicos, prohíbe el consumo de alcohol en espacios públicos, protege el patrimonio público, la salubridad y la libertad de las personas.
El alcalde de Azuqueca, José Luis Blanco, ha afirmado durante la sesión celebrada en la tarde de este jueves que el objetivo de la normativa es conseguir que la convivencia sea lo mejor posible.
Reclamaciones y sugerencias
«Queremos una ciudad tranquila, lo más agradable posible para vivir en ella», ha resumido el regidor, que ha agradecido el trabajo desarrollado por todas las partes que han colaborado en la redacción de la ordenanza, a partir de un texto base de la Federación de Municipios y Provincias (FEMP).
Han votado a favor los concejales del equipo de gobierno (PSOE), de Vox y de Ciudadanos; se han abstenido los representantes del PP y han votado en contra los de IU.
La normativa se publicará en el Boletín Oficial de la Provincial y en el tablón de anuncios del Ayuntamiento y durante 30 días se podrán presentar reclamaciones o sugerencias, que deberán ser resueltas por la Corporación.
Si no se presentaran, la ordenanza quedará aprobada de manera definitiva, sin necesidad de un nuevo acuerdo expreso por parte del pleno.
Limitaciones en el consumo y la venta de bebidas alcohólicas
Cuando entre en vigor esta ordenanza, en Azuqueca de Henares estará prohibido el consumo de bebidas alcohólicas y otras drogas en los espacios públicos, así como la venta de bebidas alcohólicas entre las 22 y las 8 horas en establecimientos comerciales, máquinas expendedoras o venta ambulante.
También quedarán prohibidas durante ese horario las concentraciones de personas en las que se consuman bebidas alcohólicas en la vía pública que alteren la normal convivencia ciudadana, de forma que se refuerzan los mecanismos contra los botellones.
La nueva ordenanza establece un marco más rígido que el actual para combatir conductas incívicas en materia de suciedad, tenencia de animales, daños en el mobiliario urbano, depósito de residuos en vía pública, ruidos y vandalismo.
Durante el debate, se ha eliminado una referencia a la ocupación de viviendas y los ediles se han comprometido a abordar esta cuestión en un plan municipal contra la ocupación de viviendas, de manera más pausada.