El secretario general del PSOE de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha advertido de que «seguramente» la región va a «pagar muy caro» que la presidenta regional, María Dolores de Cospedal, sea a su vez secretaria general del PP a la hora del reparto del déficit entre las comunidades.
García-Page, que manifestó su intención de que Cospedal explique en las Cortes regionales su posición sobre el déficit, ha insistido en su interés por que la presidenta autonómica defienda los intereses de Castilla-La Mancha «y no otros intereses del partido».
«No se puede pagar con el déficit de los demás el calmar la ansiedad o el chantaje de los independentistas,», ha planteado el líder de los socialistas castellanomanchegos, que ha tachado este asunto de «grave».
Así, ha sospechado de que ver a la presidenta autonómica «callada» signifique que «seguramente» Castilla-La Mancha vaya a «pagar muy caro que sea secretaria general del PP».
Por otra parte, se ha referido al plan de racionalización del transporte ferroviario de Fomento que contempla la supresión de líneas en Castilla-La Mancha y ha tachado este asunto de «peligrosísimo».
Así, ha asegurado que el PSOE va a «pelear a muerte» para que esta decisión no salga adelante, algo que ha dicho que espera que haga también la presidenta autonómica.
A su juicio, es «verdaderamente incomprensible» que se quiera «hundir más a Talavera, dejar aún más aislado a Cuenca o terminar de hundir a un nudo ferroviario que lo ha sido todo en España como Alcázar de San Juan».
«¿Qué los servicios ferroviarios son deficitarios? Por esa regla de tres lo que hay que cerrar es el Estado, la comunidad autónoma y los ayuntamientos», ha señalado García-Page, quien ha recordado que los trenes se pagan «con dinero público», a través de los impuestos.