El Quabit BM Guadalajara cumplió, venciendo a un BM Aragón al que ha privado de optar a disputar la próxima Champions. Queda por ver si esta victoria sirve a los hombres de Garralda para mantener la categoría, ya que su rival directo en este sentido, Academia Octavio, también doblegaba a Cuenca en As Travesas. Todo se decidirá en la última jornada, en la que el Quabit se enfrenta al Barcelona.
El choque comenzó con un parcial de 3-0 para los locales. Con los nervios a flor de piel, los errores en el pase y el lanzamiento se sucedían en ambas escuadras.
Jorge Gómez había iniciado pronto su repertorio interminable de paradas. Y con 4-1 en el luminoso, Mariano Ortega decidió detener el crono. Se llevaban disputados sólo seis minutos de partido.
El Quabit era un huracán, y Zaragoza no había comenzado a carburar. Pero con el transcurso de los minutos, la defensa maña se ajustó, y las fuerzas se igualaron.
Radulovic y De la Salud sostenían la renta alcarreña, pero el ataque aragonés era cada vez más fluido. Tres goles seguidos de Cartón acercaban a los visitantes, que hacían la goma en el luminoso.
En la reanudación, el Quabit tardó casi cinco minutos en marcar su primer tanto. Garralda se vio obligado a pedir tiempo muerto. Pero Aragón seguía perdiendo balones y errando en el tiro, con lo que no logró recortar diferencias. Sí lo hizo en los minutos siguientes, cuando el partido enloqueció, lo que benefició a los hombres de Mariano Ortega.
El Quabit se jugaba la vida, apretó y alcanzó su máxima renta (25-21). Pero una vez más reaccionó Zaragoza, que nunca dio el partido por perdido. Una exclusión a Jorge Silva propició, paradójicamente, la escapada definitiva del Quabit, que remató la faena con cinco tantos sobre el BM Aragón (32-27).