El PSOE de Castilla-La Mancha, a través de su portavoz en las Cortes de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, ha indicado en rueda de prensa que no dan ninguna credibilidad a la encuesta que ha publicado el grupo La Tribuna, en concreto al trabajo que ha hecho la empresa, «porque los medios pubican lo que les hayan mandado, pero tenemos dudas sobre su solvencia técnica».
Porque mientras en el resto de encuestas publicadas hasta el momento, «es evidente el desplome del PP en intención de voto, pero según esta encuesta subirían el número de escaños en Castilla-La Mancha«.
Guijarro ha indicado que les llaman la atención algunas cuestiones. «Por ejemplo, que la ha realizado la misma empresa que elaboró la encuesta que apareció publicada en La Razón. En este medio hicieron 300 llamadas, en La Tribuna, 3.000; lo que pone de manifiesto que, tal y como decían algunos profesionales de los medios cuando se publicó la de La Razón, ponían en duda el soporte técnico de la encuesta, porque ni siquiera sumaban el 100 por 100 de los porcentajes».
Una encuesta, ha matizado, «cuyos datos no corresponden con los publicados por el barómetro del CIS sobre los datos económicos de Castilla-La Mancha. Se aleja además de todas las series de encuestas que se publican a nivel nacional. Todos hablan de batacazo del PP, en el único sitio que subirían es en Castilla-La Mancha. Del batacazo por sus políticas impulsadas. Y la cara más clara es la de Cospedal, que es la campeona de los recortes, del desmantelamiento de los servicios públicos y la cara de la trama Gürtel».
Y ha incidido en que los datos de esta encuesta «no cuadran con el nerviosismo que muestran los dirigentes del PP cuando hablan en privado de las encuestas. Es más, el objetivo real de esta encuesta es intentar justificar la modificación del Estatuto de Autonomía para la reforma de la Ley Electoral, justificar con datos demascópicos la decisión de reducir el número de diputados, un clima favorable a ese pucherazo electoral».
Porque «con esa reducción de diputados se elimina la posibilidad de que haya representación parlamentaria de las formaciones minoritarias».