La periodista Paloma Gómez Borrero se siente muy agradecida y orgullosa ante su reconocimiento como Hija Adoptiva de Castilla-La Mancha y, aunque dice que siempre se ha sentido castellanomanchega, admite que a partir de ahora, con este reconocimiento, lo sentirá «mucho más».
Paloma Gómez Borrero, con raíces en Toledo y en Cuenca, recibirá de la mano de la presidenta castellanomanchega, María Dolores de Cospedal, el reconocimiento de Hija Adoptiva de la comunidad, el próximo viernes 31 de mayo, en el Día de la Región.
En una entrevista telefónica con Efe desde su residencia en Roma (Italia), la periodista, nacida en Madrid, recuerda que fue «la niña más feliz del mundo» en Las Pedroñeras (Cuenca), el pueblo donde nació su madre y donde pasó varios años de su infancia.
Entre otras actividades, rememora con mucho cariño cuando sus padres la «dejaban» junto a otros niños ir a trillar o a vendimiar.
Pero la periodista también tiene un vínculo muy especial con Toledo, pues su padre nació en Alcaudete de La Jara y actualmente algunos de sus familiares residen en la capital castellanomanchega.
«Sobre todo agradecer este reconocimiento a la presidenta de Castilla-La Mancha. Cuando oí el corte de sonido me emocioné mucho», afirma Gómez Borrero, a la que le enviaron a través de Internet el fragmento de sonido en el que Cospedal anunciaba su reconocimiento, junto con el de María Dueñas, en su caso como Hija Predilecta.
Precisamente, a la periodista le «encanta» compartir galardón con María Dueñas, una escritora de la que dice que «ha triunfado en España, pero también en Italia».
Desde Italia, Gómez Borrero, una de las vaticanistas con más experiencia, colabora con diversos medios españoles, entre ellos, la Cope, 13 TV, Telecinco o Televisión Española y, todo ello, a sus 77 años, una edad que dice que no le importa porque trabaja con «mucha ilusión».
Además, relata que actualmente ejerce como asesora de un musical sobre el papa Juan Pablo II, cuya música ha compuesto la cantante israelí Noa.
La periodista analiza la situación actual de los medios de comunicación y reconoce verla «con mucha pena» porque «hay una crisis grandísima» y, mientras valora haber vivido «en una época gloriosa y de oro», lamenta que ahora sea «el momento de las vacas esqueléticas».
No obstante, anima a los jóvenes periodistas a «no perder la ilusión», un aspecto que considera fundamental para finalmente «salir adelante».
Preguntada por el nuevo papa Francisco, uno de sus temas favoritos, destaca que «ha traído mucha ilusión y esperanza a la Iglesia» a la vez que «austeridad», cambios que cree que empezarán a ser notables en octubre o noviembre.
«Está dando a un mundo en el que todo se ve negro, donde hay muy poquitos valores, un motor de esperanza e ilusión», resalta la periodista, quien sobre el papa Benedicto XVI dice que «ha sido muy valiente, muy coherente y muy humilde» al reconocer que «no tiene fuerzas para seguir adelante y dejar el camino» libre.
La relación de Paloma Gómez Borrero con Castilla-La Mancha se ha visto plasmada en otros reconocimientos: en 1981 fue nombrada toledana del año, también ha recibido el ‘Ajo de Plata’ de Las Pedroñeras y ha sido pregonera de algunos lugares de la región como Madridejos y Talavera de la Reina, en Toledo, o las propias Pedroñeras, en Cuenca.