«El PP no puede vacilar», ha asegurado Emiliano García-Page, el presidente de Castilla-La Mancha, a la hora de reclamar al PP apoyo para el estado de alarma que activó ayer el Gobierno de España, una petición para que «limitar los derechos de los españoles no quede en manos de ningún presidente autonómico, menos independentista».
«Hoy tenemos un marco y agradezco que el Gobierno de España, pudiendo haberlo dejado en manos de Ayuso, de Page, de Vara o de Bonilla, haya decidido algo más, que las decisiones también son de Sánchez», ha expresado el presidente regional tras la conferencia de presidentes, en la que han participado tanto el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, como todos los presidentes autonómicos, además de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen.
«No importa quién haya tomado la decisión, me da igual que la hubiese tomado Sánchez que Rajoy», ha abundado Page, quien ha reprochado la actitud de quien «critica una cosa y la contraria» y, justo a continuación, ha añadido: «Le pido a la derecha española que sea española contra el virus, porque me resulta increíble que el estado de alarma lo pidan primero los catalanes y los vascos y resulte un problema para la derecha de España. No estoy de acuerdo», ha zanjado el presidente.
Las tres peticiones de Page
En la comparecencia de prensa, Page ha explicado las tres peticiones que ha trasladado en la conferencia de presidentes. La última es la ya mencionada, la petición de apoyo para el estado de alarma y que este sea gestionado por el Gobierno de España. «Prefiero un estado de alarma para toda España a que haya 17 estados de alarma», ha afirmado.
Pero antes de ese punto, ha agradecido la presencia de Von der Leyen en la conferencia y le ha transmitido las otras dos cuestiones.
En primer lugar «liderazgo europeo» para controlar la pandemia, en especial con lo que a la vacunación se refiere. «Cuando llegue la vacuna, no nos puede faltar», ha insistido el presidente, quien también ha informado de que la presidenta de la Comisión Europea ha transmitido «un acuerdo nítido de adquirir suficiente vacuna para repartir».
En segundo lugar, ha querido mandar un mensaje de «razonable confianza y expectativa», además de pedir un esfuerzo para «encontrar una solución para el virus» y para «mitigar los problemas de la economía». En este sentido ha defendido que hay que planificar «no 70.000, sino 140.000 millones de euros que pone la Unión Europea en circulación».
Para ello ha dicho que se va a plantear «un escenario de colaboración público-privada» para sentar las bases y optar a captar esos 140.000 millones de fondos europeos. «Hoy estamos en contacto con más de 500 empresas pequeñas, medianas y grandes de la región para fabricar proyectos», ha subrayado.
Por eso ha ahondado en que «cuando se abra la ventanilla, cuando se permita que presentemos los proyectos no es cuando vamos a empezar a pensar, lo tendremos pensado y proyectado», añadiendo que lo quieren hacer «de una manera consensuada y coordinada».