La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha condenado la quema de dos turismos en la localidad toledana de Méntrida en la madrugada del miércoles, los cuales eran propiedad de dos docentes interinos que imparten clase en el IES «Antonio Jiménez-Landi».
«Este acto vandálico ha provocado que uno de los afectados haya recibido una baja laboral de índole psicológica y haya regresado a su lugar de residencia en Córdoba. El profesor ya había recibido hace dos semanas una nota de corte ofensivo, además de diversas rayaduras en el vehículo, lo que puede interpretarse como un episodio de acoso en el centro de trabajo a la espera de los resultados de la investigación que está llevando a cabo la Guardia Civil», indica el sindicato en una nota de prensa.
CSIF se solidariza con los dos profesores afectados y recuerda a la Administración educativa la necesidad de profundizar en los hechos para atajar este episodio violento. El responsable del sector de Educación de CSIF Toledo, Enrique de la Rosa, señala que «esperamos que la Consejería de Educación presente una denuncia formal contra este acto y cuando se localice al autor o autores se tomen las medidas oportunas para que esto no vuelva a suceder», además de que «pedimos a la Consejería que haga su trabajo en este centro, el cual viene teniendo múltiples problemas de convivencia, lo que perjudica seriamente la calidad de la enseñanza y en este caso, si así se constata, poniendo en peligro la integridad física de su profesorado».
En un principio, y según las fuentes consultadas por CSIF, el objetivo del acto vandálico era el docente que había recibido la nota ofensiva, pero el incendio afectó a otro vehículo de otro docente del mismo centro educativo.
De la Rosa añade que «no se puede consentir que un padre de familia que está realizando un trabajo que sustente a su familia tenga que soportar estos y otros hechos en contra de su integridad física y la de su familia, además del deterioro psicológico que estos actos pueden suponer para su persona y entorno».