La Audiencia Provincial de Guadalajara ha condenado a nueve meses de prisión e inhabilitación a José Luis Gismera Cortezón, expresidente de la Unión Provincial de CSIF Guadalajara, por un delito de falsedad documental.
CSIF le expulsó en 2015
Anteriormente, la Central Sindical expedientó a José Luis Gismera Cortezón por faltas graves y muy graves en su gestión y fue expulsado de manera definitiva de la organización en octubre de 2015.
Gismera se prodigó en ese momento con duros y falaces comentarios en muchos ámbitos y medios de comunicación acusando injustamente al sindicato por su expulsión, el cual recurrió presentando una demanda que retiró más tarde, quedando claro en su proceder que difundió tales opiniones a sabiendas de su injusta falsedad.
CSIF no respondió entonces a sus acusaciones, pero ahora con esta sentencia de la Audiencia Provincial de Guadalajara, que le condena a nueve meses de cárcel, le damos la más contundente e irrefutable respuesta.
El sindicato se querelló contra Gismera en marzo de 2016
Además de su expulsión definitiva del sindicato por cometer faltas graves y muy graves, tras su salida, el Comité Ejecutivo Autonómico de CSIF Castilla-La Mancha, y tras comprobar acciones hasta ese momento desconocidas, decidió por unanimidad querellarse contra Gismera en marzo de 2016 al incurrir en una falsedad documental, ahora probada, en la adquisición de un local en Guadalajara cuando era presidente de la Unión Provincial.
A la pena privativa de libertad, de nueve meses de duración, condicionada “en todo caso a que el reo no vuelva a delinquir en el periodo de suspensión de tres años”, tal y como dicta la sentencia, se suma la “inhabilitación del derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de condena”.
Tras salir de CSIF Guadalajara fundó el sindicato Sipes
CSIF ha conseguido también la reversión de la adquisición de este local asegurando la devolución del dinero usado en una compra fraudulenta, en defensa de los intereses de los afiliados.
José Luis Gismera, médico de profesión, procedió a fundar una vez expulsado el sindicato Sipes, integrado en Usicam, y en el que continuó liberado, lo que no le impidió desarrollar otro trabajo.
CSIF, que siempre aboga por la transparencia y limpieza en todas sus actuaciones, sale fortalecido porque ha optado por la justicia al no proteger, con su silencio, al delincuente.