El consejero de Hacienda de Castilla-La Mancha, Arturo Romaní, ha dicho que es necesario ser «exigentes» con las instituciones europeas como el Banco Central Europeo (BCE), porque tiene «herramientas para la financiación de pymes, que tiene que utilizar».
En declaraciones a los medios en la clausura de una jornada sobre líneas públicas de apoyo a la financiación de empresas organizada por CEOE Cepyme Cuenca e Inver CLM, Romaní ha señalado que «pertenecer a una unión económica y monetaria tiene exigencias y tiene que tener contrapartidas».
En este sentido ha dicho que el Gobierno de España se ha comportado como «un socio leal» en materia de reformas estructurales y de reducción del déficit y, por tanto, debe exigir esas contrapartidas.
Ha asegurado también que existen muchas herramientas en manos del BCE para la financiación de pymes.
Y ha puntualizado que, aunque «la semana pasada no aportó ninguna medida concreta y dijo que se estaba trabajando, es el BCE quien tiene las competencias en política monetaria, tiene muchas herramientas que se pueden utilizar y tenemos que ser exigentes y que las utilice».
Asimismo, Romaní ha apostado por que «cada institución desarrolle sus competencias para ayudar a países como España que atraviesan dificultades» y por profundizar en la integración bancaria de Europa «para que no haya costes de financiación distintos según las zonas.
El consejero ha defendido el papel de Castilla-La Mancha a la hora de que España haya logrado reducir su déficit y ha recalcado que «no existen precedentes de un ajuste como el que ha llevado a cabo Castilla-La Mancha», como también en el ámbito de la reducción de la morosidad.
Según Romaní, esto es «una muestra de la seriedad con que están actuando el Gobierno de Cospedal».