La Federación de Servicios Públicos de UGT exige a la Junta de Castilla-La Mancha que plasme «por escrito» que no suprimirá 3.500 plazas de personal laboral de los grupos VI y V, tal y como han puesto de manifiesto los responsables del Gobierno regional en una nueva reunión de la mesa negociadora del convenio colectivo del personal laboral de la Junta.
Según ha informado en un comunicado este sindicato, así se lo ha pedido la responsable del sector autonómico de UGT, Beatriz Tormo, al director general de la Función Pública, Juan Manuel de la Fuente, en la duodécima reunión celebrada hoy para negociar el séptimo convenio de los laborales.
No obstante, y según UGT, sigue habiendo puntos de «enorme desencuentro, tan importantes o más que la propia extinción de plazas» y cita la retirada de la jubilación parcial, el hecho de no asegurar el salario completo en caso de traslado forzoso del personal o la reducción de días de permiso, aspectos en los que la negociación está estancada.
Para Tormo, es justo mostrar cierta cautela en cada paso que se da en la negociación a la vista de precedentes como el «intento de chantaje por parte del Gobierno regional, que nos daba a elegir entre extinguir 3.500 plazas de personal laboral o suprimir 1.500 de interinos, lo que era del todo inadmisible».