El Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) ha suprimido el proyecto de Mediación Intercultural que Médicos del Mundo desarrollaba, desde 2007, en las áreas sanitarias de Toledo, Talavera y Alcázar de San Juan a través de un convenio de colaboración con el Sescam. El programa, que había atendido a 6.387 personas, era un apoyo para profesionales sanitarios y personas inmigrantes. El proyecto prevenía y ayudaba a resolver conflictos que puedan surgir asociados a diferencias culturales, idiomáticas y sociales y mejorar el seguimiento de los tratamientos.
El proyecto nació con el objeto de prevenir y solucionar conflictos que pueden surgir asociados a las dificultades para informar a los pacientes y conseguir la adhesión al tratamiento, debido a diferencias culturales, idiomáticas, sociales y favorecer las relaciones interpersonales. A lo largo de los cuatro años, el número de usuarios y usuarias ha sido de 6.387 (710 en el año 2008, 1.269 en 2009, 2.054 en 2010 y 2.354 en 2011) con un incremento del 331 por 100 desde el inicio del programa. Más de la mitad de las personas usuarias no hablaban ni entendían castellano y más de un tercio presentaba dificultades para entender el idioma.
Se trataba de un programa único en Castilla-La Mancha y pionero en España. Cabe destacar que el proyecto fue premiado en 2010 a través de los II Premios Sanitaria 2000 a la Sanidad de Castilla-La Mancha, en la categoría de campaña o acción sanitaria.
El programa se ha eliminado a pesar de que ofrecía buenos resultados según la valoración de las propias personas usuarias y profesionales. En este sentido se habían recibido nuevas solicitudes de intervención en especialidades como el área materno-infantil o del área de obstetricia y de pediatría.
Médicos del Mundo Castilla-La Mancha denuncia que con la eliminación de este proyecto empeora la calidad de las atenciones prestadas en la sanidad de la región. «La eliminación del programa va a traer como consecuencia problemas y retraso en la identificación de síntomas, interpretaciones erróneas de los procesos de somatización, comunicación insuficiente de los problemas médicos, enfoques inadecuados en materia de diagnóstico, terapia y seguimiento, dificultades del personal sanitario para explicar modelos causales a usuarios y usuarias inmigradas, incertidumbre prolongada en relación con los diagnósticos y la atención recibida, interpretación errónea del tratamiento prescrito, abandonos del tratamiento, recorrido del paciente por diversos consultorios en búsqueda de atención satisfactoria, cuidados preventivos inadecuados, clima de hostilidad y tendencia al trato poco equitativo, entre otros. Igualmente, podemos encontrar situaciones que supongan un problema de salud pública, relacionadas con enfermedades que no serán tratadas adecuadamente por lo anteriormente expuesto».
Por todo ello, Médicos del Mundo considera imprescindible disponer del apoyo de las mediadoras interculturales entre profesionales y pacientes, con el fin de ofrecer una atención de calidad, optimizar los recursos, prevenir malentendidos así como derivaciones médicas no idóneas a partir de datos e informaciones que pueden ser erróneos.
Médicos del Mundo solicita a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha que reconsidere la supresión y vuelva a poner en marcha un programa que ha demostrado su impacto y su eficacia en la mejora la calidad de la asistencia sanitaria.