El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha asegurado hoy que, efectivamente, «hemos bajado un escalón en la exigencia (se han flexibilizado las duras restricciones impuestas el 18 de enero tras la Navidad) y pido cautela. El objetivo es no volver a tomar las mismas decisiones y no puedo asegurar que no haya que hacerlo, pero me voy a dejar la piel para que no haya que tomarlas y el efecto de la vacuna sea más importante que el efecto del virus».
«Si los datos nos obligan, se toman», recalca Page
Porque lo tiene claro: «Si los datos lo permiten, relajamos; si los datos nos obligan, tomamos otra».
¿Qué puedes hacer, o no, con las nuevas medidas en CLM? Te resolvemos las dudas
Así se ha manifestado durante su visita a las obras del nuevo hospital de Guadalajara.
Page ha recalcado que a ningún gobernante «le gusta decretar cierres, estamos siguiendo el criterio de los profesionales a los que se aplaudía desde los balcones. Y no solo hay que aplaudirles, hay que hacerles caso, frente a la miseria y el oportunismo político de algunos».
Acaba la primera dosis de la vacunación a los sanitarios
Además, ha recordado que hoy precisamente «acabamos con la primera dosis de la vacunación de todos los trabajadores de la Sanidad de Castilla-La Mancha. Vamos al ritmo que nos marcan los técnicos, quienes también en su momento nos dijeron que era bueno utilizar la mascarilla y así lo hicimos, frente a los que pontifican mucho pero decían que no hacía falta la mascarilla».