«‘Mi marido ya no me pega, solo me escupe’, nos decía una víctima. La violencia de género lleva a la sumisión total». Ese ha sido uno de los testimonios que han podido escuchar hoy los alumnos de la UCLM, alertando de la gran problemática que supone la «normalización del maltrato» a la que llevan los agresores a sus víctimas.
Lo ha contado la escritora Macarena Alonso, una de las ponentes en la IV Jornada «Soy Mujer», que ha organizado encastillalamancha.es en la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) y que ha contado con la colaboración de la propia UCLM, el Ayuntamiento de Toledo, la Diputación de Toledo y el Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha. Un evento que han seguido por streaming unos 300 alumnos de la Universidad regional desde varias facultades.
«La violencia de género está más cerca de lo que pensáis»
Alonso ha recordado la historia de la asociación de la que es presidenta, María de Padilla, la cual lleva desde los años 80 ayudando a víctimas de la violencia de género. Una lacra social que no solo se manifiesta de forma física, también de manera «psicológica, que destruye y denigra la vida de la mujer».
«La violencia de género está más cerca de lo que os pensáis», ha alertado a los jóvenes estudiantes de la UCLM, justo antes de relatar un caso concreto que pone los pelos como escarpias.
Una mujer que sufría violencia de muchos tipos, tanto las ya mencionadas como la económica y sexual, acudía a la asociación y poco a poco iban mejorando, le preguntaron porqué, a lo que respondió «mi marido ya no me pega, solo me escupe», ha explicado Alonso justo antes de recordar el peligro que supone también para las víctimas tener que «normalizar» esos terribles comportamientos.
Por ello ha dicho a los alumnos que se van a encontrar «con este tipo de situaciones» y ha invitado a los chicos a «pensar en igualdad», porque a veces esos maltratadores son «víctimas de sí mismos» y con «una autoestima por los suelos quieren sentirse poderosos machacando a una mujer», ha lamentado.
«No queremos estar por delante de los hombres, ni por detrás», ha sentenciado la escritora.
Relato de pandemia en primera persona de Rosana Braojos Bautista
«Soy Rosana Braojos… Bautista, el apellido de mi madre es importante, es el apellido de una mujer«. Así ha comenzado su intervención la enfermera y actriz su intervención, que ha sido un emocionante relato en primera persona de cómo han vivido los sanitarios la pandemia, en su caso en el Hospital Virgen de la Salud de Toledo.
Recuerda la primera víctima, una mujer de poco más de 40 y cómo en un principio «nos habían engañado», ya que la media de edad en su planta covid era de poco más de 50.
Ha agradecido el «comportamiento ejemplar» de los pacientes en aquellos días y también la actitud de la ciudadanía, con las muestras de apoyo que les hacían llegar, tanto en los aplausos como por los regalos y mensajes de apoyo que recibían en el mismo hospital.
Vea completa la mesa de debate «Palabra de mujer»:
«No todo es talento, en la investigación lo importante es la perseverancia»
Científica de referencia, Carmen Fernández ha participado en la jornada para contar a los alumnos de la UCLM cuál es el camino hasta poder llegar a ser investigadora principal, como es su caso, que dirige un Grupo de Investigación en el Hospital de Parapléjicos.
Ha invitado a los alumnos a que apuesten por la investigación, aunque ha recordado lo duro que es el camino y ha explicado que la pandemia ha demostrado lo importante que es para la humanidad. «Hemos sido capaces de unir fuerzas desde distintas partes del mundo, colaboración para encontrar una solución».
También ha indicado que no hace falta ser «un genio» para ser científico. «Todos lo podéis ser si tenéis la formación adecuada», ha dicho, puesto que en este campo «para el éxito no todo es talento, lo más importante es la perseverancia».
Así, ha indicado que en esa profesión es importante «salir de la zona de confort» y completar la formación en el extranjero, donde se puede enriquecer sus conocimientos, pero «sin renunciar a volver», ya que, aunque es complicado trabajar en España en investigación, sí que hay un «altísimo nivel en el país».
«Nos formamos fuera en liderazgo para cuando tengamos la opción dirigir un grupo de personas», ha subrayado.
Elena López, o cómo superar todo lo que venga por delante, incluida la Covid-19.
Elena López es sinónimo de sin límites. Esta mujer, natural de Mora (Toledo), es un auténtico ejemplo de superación, a la que nada se le ha resistido a pesar de lo difícil que se lo ha puesto la vida en ocasiones.
Tiene parálisis cerebral y años después le diagnosticaron esclerosis múltiple, pero como para Elena López nada es un impedimento, por segundo año consecutivo ha logrado poner la nota más emotiva de la jornada. Porque a Elena hay que escucharla, su testimonio es impresionante.
Recuerda que tras una adolescencia donde «no fue un camino sencillo», descubrió todo el potencial que tenía dentro, sobre todo gracias a un profesor de la Universidad Laboral, quien confió en ella, y Elena respondió aprobando la formación profesional y posteriormente graduándose en la UCLM.
«Alguna persona ha llegado a pensar que era tonta. Que no comprendía que estaba pasando a mi alrededor. Simplemente intenté tomármelo a broma, pero lo cierto es que me lloraba el alma. He aprendido mucho de todo esto para poder demostrar que tener una discapacidad no impide que puedas lograr lo que te propongas aunque te encuentres más dificultades en el camino», ha expresado en la jornada López.
En el camino se enamoró de Jesús, también con parálisis cerebral, quien «se ha convertido en el bastón de mi vida», ha festejado. Juntos tuvieron que «luchar contra viento y marea» para «demostrar a nuestras familias que tener una discapacidad no es impedimento para amarnos como cualquier pareja humana».
Y, claro, esta pareja que no deja de superarse y de romper barreras y estereotipos, también lo ha hecho en pandemia.
Tanto Elana como Jesús cogieron la maldita Covid-19, la cual les llevó a los dos al hospital, pero en esta muestra de superación, no hay pandemia que pueda con la robusta pareja, que tuvieron «la suerte» de compartir habitación en el hospital y superar la enfermedad juntos tras varios días ingresados.
Por último, Elena ha agradecido a quienes le han «ayudado a llegar hasta aquí», una mujer que logra lo que se propone (ahora está escribiendo el libro de su historia), ya que «como sugería Don Quijote, hay que vivir loco y morir cuerdo».
«De un modelo policial represivo a una vocación de servicio al ciudadano»
«Hay que romper con los estereotipos y dar más visibilidad a la mujer», ha dicho hoy en la jornada la única oficial de la Policía Local de Toledo, Isabel García Rodríguez, quien ha expresado cómo el papel de la mujer en los cuerpos ha pasado de labores «más estéticas», cuando comenzaban a formases estos cuerpos en los 80, a unos en los que las mujeres poco a poco van rompiendo barreras y se van igualando, aunque todavía en los puestos de mayor rango la desigualdad es palpable y solo tres mujeres en Castilla-La Mancha tienen rango de oficial entre todas las policías locales.
«Me pregunto porqué se obstaculiza a las mujeres el acceso a los puestos de mando», ha expresado, y ha pedido abandonar ese «sentimiento de culpa» que en ocasiones obliga a las mujeres a «elegir entre la maternidad y la profesión», porque las mujeres tienen «capacidad de liderazgo y eso no tienen nada que ver».
Por eso ha reclamado un modelo en el que las diferencias entre géneros «sumen y aporten su valor» y ha recordado que en los puestos de mando son necesarias virtudes como «ser comprensivo y tener capacidad de trabajar en equipo», capacidades sobradamente relacionadas con la mujer.
«Las mujeres tenemos que creer en nosotras mismas», ha recordado, dado que ha abogado por un modelo policial donde también el sexo femenino pueda dejar su impronta y pasar de un obsoleto «modelo policial agresivo y represivo a una vocación social y de servicio a la ciudadanía«.
«La mirada de los hombres no tiene nada que ver con la mía, no es mejor ni peor, tan solo diferente, pero yo me veo cada día obligada a adaptar mis ojos a los suyos. Conservar nuestra mirada conociendo la suya nos aporta sabiduría, independencia y libertad», ha concluido la oficial de Policía citando a Ana Carrascosa.
“Soy Mujer”, testimonios, recelos, actitudes machistas, muchos sacrificios…
Tolón, en la IV Jornada Soy Mujer: “Me dijeron que nunca podría ser alcaldesa porque…”