La llegada de las primeras partidas de los fondos Next Generation a Castilla-La Mancha puede generar 43.200 empleos en la región sólo este 2021, según las estimaciones hechas por CCOO a partir de las previsiones de crecimiento del Producto Interior Bruto asociadas a los fondos europeos.
Así lo ha asegurado el secretario general de CCOO en Castilla-La Mancha, Paco de la Rosa, antes de una reunión de trabajo en Ciudad Real, para abordar el plan de trabajo para hacer seguimiento a estos fondos en la provincia y en cada municipio, ha informado el sindicato en nota de prensa.
Toledo, la provincia donde se creará más empleo
Las estimaciones de generación de empleo asociado al Next Generation sólo este año apuntan a los más de 43.000 empleos, de los que a Ciudad Real corresponden 10.200; a la provincia de Toledo 14.200 empleos en 2021; a la provincia de Albacete 8.500; a la provincia de Guadalajara corresponderían 5.700 empleos, y a la de Cuenca 4.600.
“La inyección de recursos seguramente generará más recursos indirectamente, porque también esta recuperación de la economía reactivará el consumo y mejorará el empleo en otros sectores”, ha explicado Paco de la Rosa.
Estos empleos además deben permitir la necesaria transformación de la economía y el modelo productivo del país y de Castilla-La Mancha, ha señalado el secretario regional de CCOO, quien ha señalado que los fondos se estructuran en torno a cuatro ejes, que son transición verde, transformación digital, igualdad, y cohesión social y territorial.
De la Rosa ha apuntado que los fondos cumplirán su papel de transformar la economía y el modelo productivo siempre que vengan acompañados de «reformas estructurales inaplazables», entre las que ha citado un sistema fiscal que sea progresivo, la reforma del sistema laboral, modernización del mercado de trabajo y reequilibrar la negociación entre empresas y trabajadores.
Por todo ello, ha afirmado que CCOO trabajará en cada rincón de la región para «dar una dimensión social a estos fondos, para salir de esta crisis de otra forma».
«Deben servir para transformar la forma de trabajar, el modelo económico, las formas de vivir; en ningún caso permitiremos que ese tránsito hacia una economía verde y la digitalización se haga obedeciendo a criterios puramente económicos”, ha concluido De la Rosa.