Castilla-La Mancha va a modificar las restricciones de la pandemia. Será para flexibilizarlas en los eventos taurinos, donde mantendrá el 75 por 100 de aforo, pero ya no existirá la necesidad de guardar la distancia de seguridad de un metro y medio, y no habrá que sentarse «a tresbolillo», siendo esta la principal novedad con respecto a las medidas aprobadas en mayo.
Así lo ha anunciado el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, quien ha recordado que en la región seguirán en vigor las normas que rigen en la actualidad, dado certidumbre de este modo a las celebraciones como las bodas que se lleven a cabo en las próximas semanas, en una comparecencia en la inauguración del instituto Luisa Sigea, en Tarancón (Cuenca).
«Podemos recuperar una tradición que mueve mucho dinero», ha afirmado el presidente con respecto a la tauromaquia.
Sobre el cambio de la colocación en el aforo de las plazas, Page ha recordado que cuando no se pueda cumplir con la distancia de seguridad habrá que usar mascarilla.
No se incrementan restricciones
Y es que Page ha recordado que Castilla-La Mancha continúa siendo la comunidad autónoma que mejores cifras de contagios presenta de todo el país, una situación que se ha prolongado durante todo el mes de julio, aunque los contagios siguen en aumento.
Pero el presidente ha festejado que las cifras de incidencia a 7 días vienen mejorando a las de 14, por lo que se intuye que los contagios no subirán mucho más. «Los datos de 7 días mejoran a los de 14, pueden ser positivos», ha indicado.
«Aquí va muy bien, no presumo de que llevemos un mes con los mejores datos, no creo que nadie pueda apuntase da celebrar el éxito en una pandemia con lo muertos que hemos tenido», ha expresado Page.