La presidenta de Castilla-La Mancha ha apostado por una universidad que tienda hacia la internacionalización, competitiva y que aspire a la «excelencia» en la labor investigadora. Muy en la línea de lo expuesto por el nuevo rector de la UCLM, Miguel Ángel Collado, María Dolores de Cospedal ha puesto de manifiesto en su toma de posesión que «el objetivo de dar la mejor educación a los castellanomanchegos es algo que comparte su gobierno con la Universidad regional».
En un acto en el edificio San Pedro Mártir de Toledo al que han asistido diferentes miembros de su Ejecutivo, representantes de la vida social, económica y de las fuertas de seguridad, y una amplia representación de la comunidad educativa, Cospedal se ha referido a la complicada situación económica por la que atraviesa el país y a la austeridad que se hace necesaria «para garantizar los servicios públicos básicos». No sin antes afirmar que la Junta trabaja para garantizar el cumplimiento de los compromisos adquiridos, ha apuntado que «la universidad no puede estar ajena a este esfuerzo de austeridad ya que es la mejor manera de garantizar el presente y futuro de la enseñanza».
La presidenta ha colocado a la UCLM como ejemplo de respeto al debate de las ideas que ha demostrado durante el proceso de elección de rector. También ha valorado que «el trabajo que hace la universidad representa uno de los más sólidos fundamentos del desarrollo económico, social y cultural», es más, «la universidad es uno de los patrimonios más valiosos y exigentes de la comunidad autónoma, por eso la concibo como una empresa colectiva».Tal y como ha indicado «para mí la universidad no es solo un lugar, sino una etapa vital en la vida de una persona» y es que «el afán de superación, el esfuerzo y el tesón es la más clara distinción del ser humano».