El programa de actividades programado por el Ayuntamiento de La Puebla de Almoradiel (Toledo) con motivo de las fiestas de verano en honor al patrón de la localidad, el Santísimo Cristo de la Salud, resultan de una gran variedad y muy completas, pues hay de todo dado que ha pensado en todos los vecinos.
Los vecinos cuentan con las noches en la feria, los bailes en la Plaza de la Virgen y en la pista de la Montería y los paseos por el recinto ferial, justo antes de empezar la tarea de la vendimia.
Lo más destacado por encima de todo en estas fiestas de la localidad toledana de La Puebla de Almoradiel es la festividad y figura del Cristo de la Salud. La santa imagen atrae a peregrinos llegados de cualquier rincón de la geografía regional, como a los vecinos de las localidades limítrofes a La Puebla de Almoradiel, tanto el día 31 durante el traslado de la imagen desde su ermita a la iglesia o al día siguiente, la jornada del recorrido inverso, cuando las calles de la localidad están llenas de fieles.
Pero los almoradienses no solo festejan y veneran la imagen del Cristo de la Salud, ya que la oferta incluye para jóvenes, mayores, hombres, mujeres, niños y niñas un variado programa de feria, con actividades y espectáculos deportivos, lúdicos y de ocio, como el súper Gran Prix infantil, el tren turístico y la actuación del acróbata André Colombo en su show «Animal Wheeling» en calle Otumba.
También hay actividades musicales: los conciertos de la Banda de Música Municipal «La Flor de la Mancha» y el «Réplica Fest» en el auditorio municipal de verano; por último, la gala musical «Yolanda Lazo» cierra las fiestas.
Además, si propios vecinos y visitantes quieren conocer más la localidad una de las alternativas es la arquitectura religiosa: la Iglesia de San Juan Bautista y las ermitas de la Virgen del Egido y del Santísimo Cristo de la Salud (esta última fue mandada construir por Francisco Sánchez Roldán, personaje muy influyente en el municipio en el siglo XVII).
Estos edificios constituyen el centro cultural y artistico más importante del municipio. La mezcla de estilos arquitectónicos, consecuencia de las diferentes fases de construcción, hace dificil su datación cronológica, pudiéndose remontar las etapas más antiguas de edificación a la Edad Media, más concretamente al periodo comprendido entre los siglos XII y XIV, observándose restos del estilo románico y gótico en algunas partes tanto del interior del templo como de la fachada.