Lo tiene muy claro. Si dependiera de él, la expansión de Globalcaja tendría como primer paso la fusión con Caja Rural Castilla-La Mancha. Por primera vez da su versión sobre las razones que abortaron la fusión que las cajas rurales de Toledo y Ciudad Real, de la que él era presidente, emprendieron en 2010. Pronostica un sistema financiero español dividido entre bancos y cajas rurales, defiende una sola caja para Castilla-La Mancha y anuncia noticias de fusión y alianzas antes de dos meses. «Yo no quiero estar solo, no soy de los que digo que me siento fuerte y no quiero más, yo quiero alianzas». A buen entendedor… En portada de encastillalamancha.es podrán conocer más asuntos tratados en la entrevista con Díaz Zarco.
El Gobierno de España ha anunciado que en febrero comienza la reestructuración del sistema financiero, que tiene que estar lista en junio. ¿Qué mapa prevé para junio?
Lo veo muy comprimido. Va a ser parecido al sistema francés, donde hace 8 o 10 años las cajas de ahorro las absorbieron las cajas rurales. Aquí no ha pasado eso, pero lo están haciendo los bancos. Vamos a quedar las cajas rurales y habrá que hacer cosas este año.
Eso decía en la entrevista con encastillalamancha.es el portavoz del Grupo Popular en las Cortes, Francisco Cañizares. Opinaba que las cajas de la región no podrán escapar a la dinámica de fusiones o reforzamientos, entre ellas o con entidades de fuera.
Como secretario general de la Unac, siempre he dicho en Madrid estos años de atrás que deberían quedar 15 o 16 cajas rurales, más o menos una por comunidad autónoma. Eso ya no va a poder ser, yo creo que va a haber que hacer una concentración en seis o siete grupos de cajas rurales interregionales. Ya han hecho un SIP en Extremadura y Andalucía. También lo ha hecho Cajamar…
«LO PRIMERO ES QUE LAS CAJAS RURALES DE LA REGIÓN FUESEN UNA SOLA, PERO…»
¿En qué grupo y con qué compañías se ve?
Hicimos un intento de fusión con Toledo en su día y no se pudo llegar a ello. Pero yo creo que lo primero es que las cajas rurales de Castilla-La Mancha fuesen una sola, pero ése es un tema que no me compete a mí ahora mismo. Mi deseo siempre ha sido que eso existiera.
¿Lo ve posible?
Por mi parte sí. Pero es complicado.
Los responsables de Caja Rural Castilla-La Mancha lo han descartado, al menos en sus declaraciones públicas.
Por eso digo que mi idea no es la de ellos, ellos tienen otra idea.
¿Qué movimientos piensa hacer Globalcaja en ese escenario de alianzas que se dibuja?
En Madrid hablamos entre diversas cajas que somos de características similares. Cuando haya un empuje para que las fusiones se produzcan, estaremos siempre en la salida.
¿Con qué cajas les veríamos? ¿Es mucho pedir los nombres?
Es mucho pedir (risas).
¿Puede pasar que haya noticia en dos meses?
Seguro que habrá noticias. Habrá muchas alianzas, se siguen produciendo día a día y nosotros estamos en esa estrategia.
¿Globalcaja aspira a ser parte de una de esas alianzas o a pilotarla?
Estamos preparados para liderar y capitanear y para integrarnos, En cualquiera de las dos fórmulas estamos preparados, tenemos capital humano, tenemos unas direcciones generales que son gente preparada y un comité de dirección de 10 personas que ya los quisieran muchos. Cuando estábamos solo en Ciudad Real ya éramos un referente mundial en las cajas rurales y ahora aquí en Toledo seguimos siendo el referente. La gente nos pregunta cómo lo hacemos, ya veréis los resultados cuando los presentemos dentro de unos días.
¿Cómo ha quedado 2011, conforme a lo previsto?
Sí, no quiero adelantar porque estamos cerrando las fundaciones, el fondo de obra social y todo eso, pero los resultados van a ser muy buenos. Los daremos a conocer en unos días.
Si dependiera de Luis Díaz-Zarco, ¿el primer paso para el crecimiento de Globalcaja pasaría por la fusión interna, con Caja Rural Castilla-La Mancha?
Sí. Si de mí dependiera, sí. Pero es que nadie nos puede obligar a las cajas a que hagamos algo que nos digan desde atrás. Las cajas somos libres para coger nuestro camino y nuestro destino, nadie nos puede obligar. Nadie puede obligar a Toledo a que se fusione con nosotros ni a nosotros con ellos, tiene que ser un acuerdo entre nosotros. Mi deseo es que las cajas rurales tomen el tamaño y la fuerza que necesita España. Y dentro de España, primero lo tenemos que tener en las comunidades autónomas.
Nadie les puede obligar, pero sí se lo pueden pedir, ¿Alguien le ha pedido desde sectores políticos, empresariales o financieros que se fusionen las dos cajas de la región?
Las voces se oyen por todos sitios, pero yo ya soy proclive a las fusiones. A ésa y a más. Yo no quiero andar solo, ni soy de los que digo que me siento fuerte y no quiero más. Yo quiero alianzas, sea con Toledo, sea con las pequeñitas, sea con quien sea. Siempre he dicho que las dos Castillas tendríamos que estar unidas.
¿Quién se lo pide más: los políticos, los empresarios o el Banco de España?
El Banco de España no nos presiona nada, lo que quiere son entidades fuertes y sanas. Nosotros estamos sanos, fuertes y también pequeños, el único defecto que tenemos las cajas rurales; pero eso al Gobierno no le preocupa, porque estamos sanas.
¿Los empresarios y los políticos sí les piden que haya fusión?
Todo el mundo piensa que nos vamos a fusionar y está diciendo que es necesario. Y es necesario porque hay que globalizar el mundo económico, pero atendiendo el mercado minorista como lo estamos haciendo y formando parte del Banco Cooperativo, que es la entidad que nos respalda en operaciones mayores. La necesidad de fusión está en la economía de escala y en el ahorro de costes.
«CIUDAD REAL, CUENCA Y ALBACETE NOS PUSIMOS DE ACUERDO EN UN DÍA»
Antes mencionaba de pasada esa fusión con Toledo con que no cuajó. ¿Qué pasó aquel verano de 2010 que la fusión de Toledo y Ciudad Real fracasó y nació Globalcaja de la unión de todas las demás y Ciudad Real?
Teníamos casi el acuerdo con Toledo, nosotros no queríamos títulos ni titulitis, queríamos trabajar nada más. No fue posible, porque hubo varias cosas en las que no éramos coincidentes, en la forma de administrar. Sin embargo, los presidentes de Ciudad Real, Cuenca y Albacete nos pusimos de acuerdo en un día que hablamos.
Cuando habla de titulitis, ¿se refiere a que en su opinión Toledo reclamaba demasiado poder?
Nosotros no queremos poder, queremos trabajar.
«SI ALGUIEN NO SE GANA UNA COSA NO SE LE PUEDE DAR»
¿Por qué se rompió aquella fusión?
Nosotros siempre reclamamos trabajar. Llevo en la banca toda mi vida, empecé de botones y en la banca, como en todo en la vida, las cosas hay que ganárselas. Al que se las gana hay que dárselas y si alguien no se gana una cosa, no se le puede dar.
Fue una ruptura muy aparatosa y ante los ojos de la prensa.
Por parte de Toledo, por parte nuestra no.
¿Le queda alguna espina de aquellos momentos?
No, yo quiero a Toledo, a sus gentes y a la Caja Rural de Toledo. No tengo ninguna espina, nunca he tenido ninguna palabra contra ellos, de mí lo único que pueden esperar es cariño y colaboración.
¿Ustedes rompieron unilateralmente y sin avisar un contrato firmado y pedían más de lo que correspondía a su tamaño? Eso era de lo que se quejaban en Toledo.
Nosotros demandamos las cosas que nos hemos ganado. Nosotros lo que pedíamos es porque creíamos que nos lo habíamos ganado, no pedimos nada raro. No se hizo la fusión porque no se reunieron las condiciones, pero no es verdad que rompiéramos ningún contrato, no es verdad; eso no es verdad.