Castilla-La Mancha dispondrá de nueve de los 55 equipos de la Guardia Civil para luchar contra los robos en el campo y que van a actuar en tres de las cinco provincias de la región, Toledo, Ciudad Real y Albacete.
Según ha explicado el delegado del Gobierno, Jesús Labrador, en un receso de la reunión con los responsables de las organizaciones agrarias, que colaborarán estrechamente con los agentes para detectar a los sospechosos.
Los equipos ROCA (RObos CAmpo) situados en la región podrán actuar de forma interactiva con otros grupos y su composición podrá variar, aunque en Castilla-La Mancha estarán desplegados una quinta parte del total de los 275 anunciados por los ministros del Interior y de Agricultura, Jorge Fernández Díaz y Miguel Arias Cañete.
Desde el pasado mes de agosto, cuando estas patrullas especiales de la Guardia civil han empezado a actuar, se ha notado una reducción de casi el 7 por 100 en los robos en el campo en la región y ha aumentado un 6,2 por 100 el número de delitos esclarecidos, ha explicado Labrador.
Ello significa, ha precisado, que las medidas están funcionando y cuando entre en vigor la modificación del Código Penal, que endurece las penas con castigo de prisión, «creemos que daremos un paso definitivo en la solución del problema», ha dicho el delegado del Gobierno.
Labrador ha explicado que no puede concretar la ubicación exacta de estos grupos en la región por la «itinerancia» de los delincuentes y de los grupos que actúan de forma organizada y se mueven por toda la geografía española.
EFECTIVOS DEL BATALLÓN DE CABALLERÍA DE LA GUARDIA CIVIL
A estos grupos móviles se podrán sumar los efectivos del Batallón de Caballería de la Guardia Civil cuando lo requiera la orografía y las circunstancias, y también se podrán incorporar con refuerzos puntuales agentes de los Grupos Rurales de Seguridad.
Según los datos facilitados por Labrador, en España los robos en el campo representan un 2,5 puntos del total de la tasa de criminalidad, que es de 47,7, mientras que en Castilla-La Mancha la tasa de los robos en zonas agrícolas y ganaderas está casi medio punto por debajo del promedio nacional, del 2,04 .
Los grupos ROCA van a actuar de forma directa en colaboración con las Organizaciones Agrarias, que tendrán a una persona de referencia para comunicar posibles incidencias y circunstancias anómalas que detecten, como puede ser, por ejemplo, la presencia de un vehículo sospechoso.
Habrá encuentros mensuales entre las organizaciones agrarias y los responsables de las comandancias y también habrá reuniones, cada dos meses con la delegación del Gobierno para ir evaluando la situación.
Sobre las patrullas ciudadanas y la contratación de vigilancia privada, Labrador ha dicho que el Gobierno es consciente del problema y que no va esconder la realidad, pero, «lo estamos resolviendo con las organizaciones agrarias, con dialogo y con los mejores métodos».
Por su parte, el secretario regional de Asaja, José María Fresneda, se ha mostrado «satisfecho» con este plan de seguridad, que ha denominado «experimento de choque» y que supondrá una «medida muy disuasoria» para los delincuentes, aunque también ha reconocido que a quien haya sufrido un robo esta noche no le parecerá igual.
Para facilitar la labor de vigilancia y prevención de la delincuencia en el medio rural, las organizaciones agrarias van a entregar a los mandos de la Guardia Civil un «mapa de cultivos», así como la época de inicio de las campañas agrícolas o de caza.
También van a participar en «jornadas informativas» o «cursos de formación» en las que los agentes les explicarán como identificar mejor un robo o la presencia de un posible delincuente.