Los sindicatos CCOO y UGT calculan que los 355.500 pensionistas que hay en Castilla-La Mancha perderán en los próximos nueve años entre 1.199 y 2.544 millones de euros, dependiendo de si el IPC sube un 1 % o un 2 %, a una media anual individual de unos 400 euros menos.
En rueda de prensa, los secretario regionales de UGT y CCOO, Carlos Pedrosa y José Luis Gil, respectivamente, han anunciado movilizaciones en la calle para protestar por la reforma de las pensiones del Gobierno, que prevé que hasta el año 2022 no se podrán revalorizar conforme a la subida del IPC.
Según la reforma propuesta por el Gobierno, las pensiones subirán un 0,25% con independencia de la subida de los precios y podrán hacerlo este porcentaje más el IPC cuando el sistema de pensiones tenga «superávit», lo que no ocurrirá hasta el 2022, han explicado Gil y Pedrosa.
Por ello, los 353.500 pensionistas de Castilla-La Mancha dejarán de percibir en estos nueve años 1.199 millones de euros si el IPC solo sube un 1%, algo «improbable».
Si los precios subieran al 2%, un porcentaje que se ajusta más a la realidad de lo que ahora ocurre, los pensionistas de la región dejarán de percibir 2.544 millones de euros y si se incrementaran un 3%, la pérdida para los pensionistas de Castilla-La Mancha ascenderá a 3.998 millones de euros.
A juicio de estos sindicatos, se trata de la «medida más injusta» de los 35 años de sistema democrático de nuestro país, por lo que requiere una «respuesta proporcional a esta injusticia», con el objetivo de que el gobierno rectifique este «disparate», ha dicho Gil.
Sobre la posibilidad de convocar una huelga general contra la reforma de las pensiones, Gil ha dicho que se trata de un «instrumento potente del que se habla cuando llega el momento».
Por ahora, ambos sindicatos van a explicar a los trabajadores y a la ciudadanía en general esta reforma, que afecta a los futuros y a los actuales pensionistas, parte de ellos viviendo por debajo del «umbral de la pobreza», ha dicho Pedrosa.
Han recordado además que muchas familias viven hoy en día de las pensiones de sus mayores, que se han convertido en una auténtica «red social».
También se han referido a lo que dijeron a principios de 2011, cuando estaban en la oposición, tanto el presidente Mariano Rajoy como la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, quienes criticaron la congelación de las pensiones aprobada por José Luis Rodríguez Zapatero.