No cesan de aparecer proyectiles de la Guerra Civil en Castilla-La Mancha. El último lugar, Valdearenas, en la provincia de Guadalajara. Allí un vecino localizó una bomba que no explotó en el conflicto bélico y que ha llegado hasta nuestros días.
Desactivado por el Sedex
Avisó a la Guardia Civil y hasta allí se personaron los efectivos del Sedex (Servicio de Desactivación de Explosivos). Los agentes desactivaron el proyectil anoche, eliminando este peligro que había en la localidad guadalajareña.
En una publicación de la Guardia Civil en las redes sociales alerta de que si se encuentra uno de estos artefactos hay que ponerlo en conocimiento llamando al 062, recordando que no hay ni que manipularlo ni trasladarlo.
Valdearenas es una pequeña localidad de menos de 100 habitantes, situada a 30 kilómetros de Guadalajara y cercana a los municipios de Brihuega y Trijueque.