Aprobado el plan para llevar fibra óptica a 197 municipios más de Castilla-La Mancha, la mayoría acechados por la despoblación. Una ambiciosa propuesta llegar a casi 30.000 personas y llevar a cabo en 2022 y , un año que terminará con el 93 por 100 de los ciudadanos de la región con acceso «conexión ultrarrápida».
Así lo ha indicado la portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Blanca Fernández, en lo que ha definido como una apuesta por dar las mismas oportunidades a los ciudadanos independientemente de donde vivan y que además permitirá crear 157 puestos de trabajo directos.
«Igualdad de oportunidades por la que apostamos en el Gobierno de Castilla-La Mancha. En el siglo XXI no se entiende que haya zonas en blanco y no tengan conexión a internet», ha expresado la consejera.
El 85 por 100 en zonas de despoblación extrema
Una mejora para las poblaciones que está afectadas por el despoblamiento, ya que el 85 por 100 de esos municipios están en zonas de «despoblación extrema«.
«Las empresas podrán tener las mismas oportunidades, para la competitividad la conectividad es fundamental. Las zonas sometidas a la despoblación no podían conectarse a esta economía digital del siglo XXI en sectores donde esta tan importante como la industria agroalimentaria, el marketing, las exportaciones…», ha subrayado Fernández, puesto que ahora estas empresas podrán llevar a cabo operaciones como «utilizar la computación en nube, procesos de automatización o la realidad aumentada ahora serán posibles en estas empresas.
Tres proyectos
La implantación de la fibra en estos tres municipios se llevará a cabo a través de tres proyectos prioritarios en cuatro provincias, todas salvo Cuenca.
El primero de los tres proyectos se desarrollará en la provincia de Albacete con una inversión de 4,9 millones de euros, la creación de 49 puestos de trabajo y 29 municipios beneficiados.
El segundo de ellos se desarrollará en 67 localidades de la provincia de Guadalajara, con un volumen de inversión de cinco millones y la creación de 48 empleos.
El tercer y último proyecto es el que mayor montante económico necesitará. Se invertirán 21 millones para 54 poblaciones de la provincia de Toledo y 44 de la de Ciudad Real, y supone la creación de 60 empleos.