El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, abrió la puerta a que la Covid-19 se trate como una gripe, Sanidad y las comunidades autónomas debatirán sobre el plan de vigilancia centinela esta tarde, pero Castilla-La Mancha no tiene ninguna intención de adelantarse y plantear proyectos pilotos para llevar esta estrategia a cabo, que podría pasar por dejar de hacer pruebas diagnósticas y de notificar los casos como se hace actualmente, haciendo una transición progresiva.
«No vamos a soltar la mano del Consejo Interterritorial, como hemos hecho durante toda la pandemia», ha expresado la portavoz del Gobierno y consejera de Igualdad, Blanca Fernández. «El proyecto piloto será por consenso», ha abundado a preguntas de los periodistas en la rueda de prensa en Toledo en la que ha explicado los acuerdos del Consejo de Gobierno.
Y es que la consejera ha recordado que hoy en la reunión del Consejo se va a debatir algo que «llevamos mucho tiempo diciendo en Castilla-La Mancha», y es que la pandemia ya no solo se puede medir con indicadores como el de la incidencia acumulada, que hoy ha bajado en la región tras más de un mes subiendo diariamente, sino que se tenga más en cuenta «en términos de enfermedad, de afección hospitalaria, ahí es donde hay que fijar el foco y el debate».
«Ha llegado el momento de analizar la enfermedad sobre lo que provoca en las personas», ha reiterado la consejera.
Mismos casos, 12,5 veces menos de muertes
Para ejemplificar cómo ha cambiado la situación con la vacunación y la nueva variante omicron, la consejera ha comparado los datos de enero de 2021 con los de diciembre de 2022, donde ha habido una «cifra similar de casos, en torno a 55.000″.
En el primer mes de 2021 se registraron 754 muertes, mientras que en diciembre de 2022 han sido 60, aunque hay que recordar en este punto que la mayor parte de contagios en diciembre fueron en la parte final del mes, por lo que las posibles muertes surgidas de esos contagios se producirán más tarde, pero igualmente serán muchas menos.
Aún así, Fernández ha querido ahondar en el mensaje de que hay que «preocuparse, protegernos, ser responsables», aunque en estos momentos «la enfermedad, gracias a la vacuna, no mata como antes».