El PSOE de Castilla-La Mancha ha afeado este viernes al presidente del PP regional, Paco Núñez, que no haya pedido perdón al rector de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), Julián Garde, con el que se ha reunido este viernes, por el recorte de 98 millones en la subvención de la Junta cuando estaba presidida por María Dolores de Cospedal.
En una rueda de prensa, el secretario de Organización del PSOE de Castilla-La Mancha, Sergio Gutiérrez, ha señalado que Núñez «ha vuelto a la escena del crimen» en la que el PP recortó más de un 40 por ciento el presupuesto, «el mayor recorte de toda Europa para una universidad«, y puso «en riesgo» la viabilidad de la misma además de multiplicar las tasas universitarias y provocar la expulsión de miles de jóvenes por no poder pagarse la matrícula.
Núñez defiende una UCLM autónoma, con mayor carga investigadora y que apueste por el deporte
Incremento de alumnos y reducción de tasas
Asimismo, Gutiérrez ha defendido que el Gobierno regional presidido por Emiliano García-Page destina en la actualidad 190 millones de euros en la subvención a la UCLM, por lo que la institución académica ha conseguido nuevas facultades en todas las provincias, incrementar el número de alumnos y reducir a la mitad las tasas de máster para favorecer que la universidad «no sea un privilegio de unos pocos sino un derecho de acceso universal para todos los jóvenes de la región».
A vueltas con la «Kitchen»
Por otro lado, Gutiérrez se ha referido al caso ‘Kitchen’ y, en este punto, ha criticado que Núñez lleve una semana en la que «no ve, no habla y no oye» ni sobre los problemas del PP de Toledo, ni sobre María Dolores de Cospedal ni sobre las polémicas de la reforma laboral.
Según el dirigente socialista, el líder ‘popular’ lleva una semana «desaparecido» porque, a su juicio, «a todos les promete lo que quieren oír para luego no cumplir con nadie», si bien ha incidido en que «no puede aguantar ni un solo segundo más el silencio cómplice sobre algo que debe lamentar y escandalizarle» como es que «todo el mundo señale a Cospedal como el centro de una trama para ocultar la corrupción del PP a través del comisario Villarejo utilizando la Presidencia de la Junta de Comunidades y a un director general como pieza clave».
Por ello, ha considerado que si el PP de Castilla-La Mancha no es capaz ya no de limpiar y echar a los que participaron en esa trama, sino de analizar de manera negativa lo que pasó es «triste, lamentable y profundamente decepcionante», a lo que ha añadido que «cuando alguien no condena los hechos pasados, es que está dispuesto a hacerlo en el futuro».
«Tránsfugas, tamayazos y polémicas artificiales»
En otro orden de asuntos, el también diputado nacional del PSOE ha destacado la aprobación de la reforma laboral este jueves en el Congreso de los Diputados y ha subrayado que «más allá del ruido, lo importante no es cómo sino el qué se ha aprobado».
A la misma vez, ha aseverado que se trata de una reforma «buena» tanto por el contenido como por la forma porque «resuelve la alta precariedad de mujeres y jóvenes y arregla, en parte, el problema estructural en el medio plazo de las pensiones».
También ha lamentado que el PP haya demostrado «irresponsabilidad y deseos de que todo vaya mal», así como el «espectáculo» dado con «tránsfugas, tamayazos y polémicas artificiales» para intentar echar atrás un pacto «de país».
En la misma línea, la diputada nacional y vicesecretaria del PSOE de Toledo, Esther Padilla, también ha remarcado en esta rueda de prensa que la reforma laboral «beneficia a 20 millones de trabajadores» porque «mejora salarios, estabilidad y formación» y, sobre todo, «acaba con todas las medidas perjudiciales que había impuesto el PP».
Para Padilla, esta modificación de la normativa laboral es «la reforma de la dignidad que acaba con la reforma de la precariedad», ha sentenciado.