Los castellanomanchego ganaron poder adquisitivo año tras año, pero era otra época. Eran los años anteriores a 2007, los de la bonanza económica. A partir de la crisis económica, la caída llegó acentuándose a partir de 2010.
De hecho, en este sentido, en Castilla-La Mancha se registraban cifras superiores a la media nacional, pero era la década anterior a la crisis.
A partir de 2008 todo se tuerce y el poder adquisitivo cae, si bien la caída ha sido mayor en los últimos tres años y medio, según el último informe realizado por CC.OO. con fecha a 31 de agosto de 2013.
En Castilla-La Mancha se gana menos que en el resto de España. En este sentido, el salario medio de los castellanomanchegos es de 1.777 euros brutos al mes, es decir, 21.324 al año; mientras que la media nacional es de 1.928 euros brutos al mes, 23.136 euros al año.
A la hora de relacionar el salario con el Índice de Precios al Consumo (IPC) para conocer el poder adquisitivo de los castellanomanchegos, hay que precisar –como puntualiza Lucas Sánchez, secretario de Acción Sindical de CC.OO. de Castilla-La Mancha- que los datos son imperfectos. Así, por ejemplo, a la hora de hablar de IPC no se recogen, entre otros, todo el coste del dinero de los intereses de los préstamos.
PÉRDIDA DE PODER ADQUISITIVO
La pérdida de poder adquisitivo en los cinco últimos años, desde 2008 hasta agosto de 2013, ha sido de un 1,1 puntos, es decir, 0,18 puntos por año.
Sánchez destaca un punto de inflexión en estos últimos cinco años, el que se produce en mayo de 2010. Es precisamente en ese momento cuando «se acaba la inversión productiva del Estado y comienza la era de los recortes ya con José Luis Rodríguez Zapatero en la presidencia».
En los últimos tres años y medio, el poder adquisitivo ha caído en cuatro puntos, es decir, 1,15 puntos por año. Esto, traducido en euros, significa que los castellanomanchegos han perdido 72 euros por mes desde mayo 2010, es decir, en unos 865 euros menos al año.
Desde CC.OO. se insiste en la necesidad de apostar por políticas expansivas de empleo y no por los recortes. Consideran que un plan de inversión pública será la rueda que impulse la creación de empleo.