La delegación de Iberdrola en Castilla-La Mancha ha recaudado 2.658 kilos de alimentos básicos donados por sus empleados en las oficinas de Toledo (1.125 kilos), Albacete (202 kilos) y Guadalajara (201 kilos). Estas cajas de alimentos se han distribuido entre familias necesitadas de la región a través de la organización social Cáritas.
En cinco colectas organizadas en los últimos diez meses la empresa ha superado las 2,5 toneladas de productos entregados en el marco de la campaña Operación kilo Iberdrola, que se celebra bimestralmente con el objetivo de contribuir a paliar la situación de exclusión social y de pobreza en que se encuentran muchas personas en España a consecuencia de la crisis económica.
La campaña se ha desarrollado de forma simultánea en una treintena de centros de trabajo de la compañía, repartidos en nueve regiones donde Iberdrola desarrolla su actividad (Madrid, Comunidad Valenciana, País Vasco, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Murcia, Extremadura, Navarra y La Rioja). En total, ha sumado más de once toneladas (11.818 kilos) de alimentos que, a través de distintas organizaciones sociales, como Cáritas, el Banco de Alimentos o la Casa de la Caridad, se reparten entre familias necesitadas. Esta iniciativa surgió como respuesta a las solicitudes de los propios empleados, como parte del programa de Voluntariado Corporativo de Iberdrola.
Al margen de esta iniciativa, Iberdrola ha colaborado en numerosas acciones dirigidas a cubrir las necesidades básicas de familias en graves dificultades. Entre ellas cabe señalar la entrega, en los últimos dos años, de más de 5.000 kilos de comida a la asociación El Socorro de los Pobres de Toledo, o los 100 lotes de productos básicos a otras tantas familias de Arcos de la Frontera (Cádiz), seleccionadas por el Ayuntamiento.
Por otro lado, Iberdrola apoya el «Programa de Becas de Comedor» de Aldeas Infantiles, que pretende financiar la comida escolar de menores de familias con dificultades para cubrir su alimentación, cuyo objetivo es conseguir sufragar el comedor escolar de 341 niños.
Iberdrola puso en marcha su programa de Voluntariado Corporativo en 2006 con el propósito de canalizar el espíritu solidario de sus empleados y alentar su participación en proyectos sociales alineados con los valores de la compañía. Este programa le ha valido a Iberdrola distintos reconocimientos, como el premio Ciudadano, concedido por la Asociación Premios Ciudadanos y el Foro Debate Ciudadano por las acciones solidarias desarrolladas por el Grupo con las personas más necesitadas.