La Junta de Castilla-La Mancha reclama a la Comunidad de Madrid 86,7 millones de euros que le corresponden por impuestos de su competencia que han sido ingresados en la comunidad vecina.
Así consta en un oficio remitido a comienzos de año por el consejero de Hacienda de Castilla-La Mancha, Arturo Romaní, al secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, en el que se le pedía que esa cantidad se tuviera en cuenta en el caso de que se produjera alguna desviación en el déficit.
En el oficio, al que ha tenido acceso Efe, se concreta que son ingresos correspondientes al Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados competencia de Castilla-La Mancha pero que han sido cobrados en otras comunidades autónomas, sobre todo en Madrid.
Arturo Romaní explica en el escrito a Beteta que Castilla-La Mancha ha pedido en varias ocasiones el impulso del cobro de esos expedientes, que supondrían un ingreso no sólo en términos de caja sino también en términos presupuestarios, pero admite que ese cobro requiere «la colaboración» de la Comunidad de Madrid.
El consejero castellanomanchego envió también al secretario de Estado un informe de la Dirección General de Tributos con las cifras globales y el detalle de cada expediente, con la conclusión de que tiene pendientes de cobro 86.773.280,96 euros, una cifra «muy importante» para Castilla-La Mancha.
Arturo Romaní ha lamentado, en declaraciones a Efe, que el Ministerio no haya tenido en cuenta esta circunstancia a la hora del calcular el déficit definitivo de las comunidades autónomas, que en el caso de Castilla-La Mancha ha sido del 1,57% del PIB y no del 1,53%, como aparecía en el dato publicado en el mes de marzo.
Romaní ha indicado que Castilla-La Mancha ha quedado a siete millones de euros del cumplimiento «estricto» del déficit y, de haber cobrado la deuda de 86,7 millones de euros, habría cerrado el ejercicio cumpliendo con creces el objetivo.
El consejero ha añadido que el incremento del déficit en términos porcentuales se debe a una caída del PIB sobre el que se calcula, pues en términos absolutos el déficit del año 2012 fue de 557 millones, 6 menos que los que el Ministerio incluyó en el informe que envió a la Comisión Europea en marzo.
Asimismo, ha recordado que Castilla-La Mancha tuvo en 2011 «un déficit desbocado» del 7,87 %, y que ha bajado en un año al 1,57% «mucho más de lo que el Ministerio esperaba».