El 31 de enero la Audiencia Provincial de Toledo juzgará a un hombre de nacionalidad marroquí, A.R., acusado de un delito contra la salud pública tras ser detenido en las inmediaciones de la estación de autobuses de Toledo cuando circulaba con el vehículo de su propiedad llevando oculto entre su cuerpo y la ropa interior un envoltorio de plástico y ocultos en el interior de un muñeco de trapo otros tres envoltorios de plástico que contenían en conjunto 7,35 gramos de cocaína, con una pureza del 25,5 por 100 y valorada en 232 euros aproximadamente. Según dicta el informe del fiscal, el acusado poseía dicha sustancia para suministrársela a terceras personas. Por todo ello, pide cuatro años de cárcel y una multa de 600 euros. La pena de prisión podría ser sustituida, en su caso, por la expulsión del territorio español por un plazo de diez años.
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