Cada castellanomanchego recicló una media de 8,6 kilos de envases y 10,8 kilos de papel durante 2012, año en el que el 83 por 100 de los ciudadanos de esta comunidad autónoma afirmó que separaba sus residuos a diario, frente al 72 por 100 de media nacional.
El director de comunicación de Ecoembes, Antonio Barrón, ha explicado en una rueda de prensa en Toledo que en total los castellanomanchegos reciclaron 44.446 toneladas de envases en 2012.
A su vez, la tasa de impropios, esto es, los residuos que se echan en contenedores equivocados, fue del 20,6 por 100 en Castilla-La Mancha, seis puntos menos que la media española.
Barrón ha destacado que esos datos ponen de manifiesto que los castellano-manchegos están cada vez más concienciados de la importancia que el reciclaje tiene para el cuidado del planeta, como también, ha añadido, lo están las administraciones públicas que realizan la recogida selectiva y las 665 empresas castellano-manchegas que ponen envases en el mercado.
Ha señalado que Ecoembes, organización sin ánimo de lucro que coordina el reciclaje y el ecodiseño de envases en España, inició su actividad hace 14 años.
El responsable de Ecoembes ha destacado que las compañías de Castilla-La Mancha han logrado implantar un total de 1.357 medidas de ecodiseño, 225 de ellas solo en el último año, destinadas a reducir el impacto ambiental de sus envases.
Como consecuencia de la puesta en marcha de estas actuaciones, en los últimos 10 años se ha conseguido reducir un 16 por 100 el peso de los envases, por ejemplo, un yogur pese ahora la mitad que hace una década, o una lata de cerveza es un 17 por 100 más ligera.
Además de cuidar el medio ambiente, el reciclaje genera empleo, y en Castilla-La Mancha son 471 puestos de trabajo directos.
Como datos curiosos, Barrón ha indicado que con sesenta botellas de agua recicladas se puede fabricar un forro polar, o con ochenta latas, una llanta de bicicleta.