Desde el 7 de octubre el joven Manuel Moreno capta con su cámara historias de superación que tienen como escenario el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo y como protagonistas personas que, como él, han sufrido una lesión medular y se enfrentan a una nueva vida llena de constancia, miedos, dudas pero también de muchas ganas por seguir adelante.
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Manu, como así le conocen todos, estudia el ciclo formativo de grado medio «Laboratorio de Imagen» en el IES «Alfonso X El Sabio» de Toledo, de donde -tras finalizar el período de clases en el aula- ha pasado a hacer prácticas en Parapléjicos, hospital en el que él estuvo ingresado hace dos años y que pidió expresamente como destino.
En sus dependencias capta imágenes de los ingresados y pacientes en el gimnasio, en las salas de rehabilitación… también fotografías artísticas como la que hizo recientemente sobre el otoño en el hospital, e incluso se ha atrevido con el vídeo, colaborando con una campaña para evitar accidentes de tráfico, la principal causa de las lesiones medulares. Este joven -que el 25 de noviembre cumple 22 años- cuenta que «estoy aprendiendo mucho», no sólo de fotografía, sino «también a valerme por mí mismo; y, entre otras muchas cosas, a venir en coche hasta aquí, algo que antes no podía hacer».
Todas estas horas tomando imágenes en Parapléjicos le traen a Manu muchos recuerdos. No en vano, él ingresó en Parapléjicos en octubre de 2011 para recibir terapia de rehabilitación después de que una operación le ocasionase importantes problemas de movilidad. La suya es la historia de un joven que ha tenido que batallar mucho desde que a los 19 años le diagnosticaran un tumor cerebral, un tipo de tumor que suele afectar a la población infantil y que en adultos, como fue su caso, agrava mucho la situación. A pesar de los riesgos que suponía dicha intervención, finalmente los médicos le pudieron quitar el tumor de forma satisfactoria. Cuando lo peor parecía que había pasado, una infección que los facultativos no detectaron a tiempo le dejó inmóvil desde el cuello hacia abajo. Desde entonces han pasado dos años en los que ha estado ingresado en Parapléjicos, o bien trasladándose desde su casa en Los Yébenes hasta el hospital para recibir terapia, un tiempo en el que con mucho esfuerzo ha conseguido recuperar buena parte de la movilidad hasta tal punto que ya se puede levantar de la silla de ruedas y andar por lugares seguros y accesibles.
Lo más importante es que «tengo muchas ganas de hacer cosas porque ir viendo que vas mejorando te ayuda», contaba a encastillalamancha.es. De hecho, Manu es totalmente independiente a la hora de acudir con su coche a Parapléjicos. Incluso cuando estudiaba en el IES «Alfonso X El Sabio», en el barrio toledano del Polígono, se levantaba a las seis de la mañana para coger dos autobuses y estar allí a las ocho.
Una vez termine las prácticas a mediados de diciembre, tiene en mente continuar formándose en fotografía haciendo el ciclo superior, tal vez en Madrid. Le gusta lo que hace y, aunque antes de sus problemas de movilidad lo suyo era más la cámara de vídeo, «me encantaría dedicarme a esta profesión».