«La Dirección General de Sanidad, en circular nº 48, de 18 de mayo último, interesa la prohibición de baños públicos, en aquellos lugares que se consideren potencialmente peligrosos.
Como quiera que está comprobada la contaminación de las aguas del río Tajo, se prohibirá por V.S. los baños en el trayecto del río por ese Término Municipal, con la fijación de carteles bien visibles en sitios estratégicos y adoptando las medidas que estime más eficaces y adecuadas a fin de que lo ordenado se cumpla rigurosamente…».
El 19 de junio de 1972, ese día aciago para el río Tajo…
Es el anuncio que realizó, Ayuntamiento por Ayuntamiento, el entonces Gobierno Civil (lo que hoy llamamos Delegación del Gobierno). Fue el 19 de junio de 1972, han pasado 50 años (49 años y 11 meses, para ser más exactos) y hasta hoy…
Porque si entonces el río Tajo estaba contaminado, hoy lo está todavía más.
Lo ha recordado hoy la alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, durante la presentación de los actos que se van a celebrar en la capital regional los días 3, 4 y 5 de junio en la denominada «Fiesta del Tajo», en la que durante todo el fin de semana habrá música, actividades para todos los públicos, comida, bebida… en lo que se quiere que sea una reivindicación contra el actual estado de un río que está en una situación vergonzosa.
Carteles de prohibición en español, francés e inglés
Tolón ha recordado que el entonces Gobierno Civil de Toledo comunicó a todos los alcaldes de las poblaciones toledanas surcadas por el Tajo que el baño público quedaba prohibido al estar contaminado y que los ayuntamientos debían fijar carteles que anunciaran esa prohibición en lugares visibles y estratégicos, adoptando medidas para su cumplimiento.
De hecho, el Ayuntamiento de Toledo mandó colocar carteles que anunciaban la prohibición en los lugares tradicionales de baño de los toledanos con el texto escrito en español, francés e inglés, como refleja la foto que les mostramos, hecha en 1973, por Rafael del Cerro Malagón.
La alcaldesa de Toledo ha señalado que no es una fecha «para celebrar, sino para reivindicar, para visualizar el descontento de los toledanos y para que los jóvenes no olviden el compromiso que tenemos con el Tajo».