La Unión Balompédica Conquense visita el Cerro del Espino (domingo, 12 horas) con la esperanza de volver a ganar a domicilio y con ello seguir en la zona noble de la clasificación, aunque le recibirá un Atlético de Madrid B dolido por la derrota del pasado sábado, 4-1, en Laudio.
Tras el primer desplazamiento, con victoria en Sariñena, el conjunto balompédico sólo ha conseguido un punto más a domicilio, en Laudio, en su devenir liguero.
Una racha que contrasta con la mantenida en casa, donde se mantiene invicto y ha ganado seis de los siete encuentros disputados y empatado el otro.
Una situación que para el delantero del Conquense Borja Lázaro tiene poca explicación, pues ha afirmado: «Tampoco sabemos nosotros por qué nos está ocurriendo esto. Tal vez debamos salir fuera de casa con más necesidad».
Para el delantero de la Balompédica, este encuentro tiene algo de emotivo porque futbolísticamente dio sus primeros pasos en el Atlético de Madrid.
«Para mí es como una vuelta a casa porque allí me hicieron futbolista», ha admitido Lázaro, que ha dicho que tiene «muchas ganas de que llegue el partido», pero ha advertido de que en el momento empiece, su «único deseo» será conseguir la victoria.
Durante la semana, el técnico balompédico ha trabajado sobre el posible equipo que presentará este domingo en Majadahonda con la dificultad de que Aridani e Iván González, los dos laterales titulares, son bajas por sanción.
Jordi Fabregat tampoco podrá contar con los delanteros Tornero y Tajamata, por lesión.
Los que sí podrán jugar son Rangel, cumplida la sanción, y Manzano, expulsado en los instantes finales del partido ante el Sestao en un error del colegiado al confundirlo con un compañero, por lo que no ha sido sancionado.
Para el técnico blanquinegro, el equipo ha trabajado toda la semana para ver si da «con la tecla para poder volver a casa habiendo puntuado», aunque ha considerado que «es mejor no obsesionarse con ello porque, tarde o temprano, se conseguirá».