domingo, 24 de noviembre de 2024
Entrevista Irreverente a Cristina López Huerta, periodista de SER Castilla-La Mancha - 05 diciembre 2013

Vino a Toledo para seis meses, pero lleva ya siete años, «la ciudad me enganchó desde el primer momento». Entonces no conocía a nadie, «no tenía amigos, ni pareja ni nada que me atara y precisamente por eso los primeros fines de semana que me quedaba me dedicaba a pasear, me apuntaba a rutas guiadas… Y en poco espacio de tiempo sabía más de calles y de líneas de autobuses que gente de Toledo. Mis amigas se reían de mí porque decían que el ayuntamiento me tenía que dar un distintivo como guía no oficial, porque siempre que venía alguien me interesaba que se fueran con la mejor imagen de Toledo. Ja, ja, ja…».
Ella es Cristina López Huerta, periodista de SER Castilla-La Mancha, tiene 31 años, nació en Ciudad Real y lo que leen es la Entrevista Irreverente de encastillalamancha.es. Entres sus aficiones, «ver la tele, salir con mis amigos y, cada vez más, la gastronomía y elegir vinos. Ahhh… Y viajar lo que más, aunque es lo que menos hago. Me fascinó Nueva York y me gustaría acercarme al mundo oriental, no conozco Asia. Tampoco África. Tengo muchas ganas de ir a China, a la India… Y a Japón».
Devoró la trilogía de Stieg Larsson después que el primero de los títulos, «Los hombres que no amaban a las mujeres», le llamara la atención mucho antes del boom «porque pensaba que era una novela romántica. Y cuál fue mi sorpresa cuando me encontré con un thriller de suspense. Pero lo devoré. Soy de autores, si me gusta uno voy a por todos sus libros. Me ha pasado con Lorenzo Silva, Eduardo Mendoza, Lucía Etxeberría…».
Se licenció en 2005, «me cogió la SER en su seno y no me ha soltado. Empecé de becaria ese año en Gran Vía, en Madrid. Un año después me surgió la posibilidad de venirme a Toledo, aquí había una vacante y allí no me garantizaban que me pudiera quedar, y me vine. Como puedes ver mi vida laboral son dos líneas».
A partir de ahora, céntrense aún más, esto es una cuestión entre periodistas, de preguntas y de sus correspondientes respuestas…

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Cuénteme el momento en el que un buen día se rompió la mesa de mezclas…

El… ¡Se ha jodido la mesa!

Eso, ese momentazo en el que seguía en directo pero no lo sabía y que ese «¡se ha jodido la mesa!» se ha utilizado como zapping radiofónico incluso a nivel nacional.

¡Ha salido en todas partes! Lo reivindico, además, a pesar de haber sido yo una de las protagonistas, como uno de los mejores gazapos de la historia; al menos de la radio en Castilla-La Mancha. Pues te voy a contar lo que pasó. Estábamos en el «Hora 14», nuestro informativo de mediodía, y la mesa de mezclas, que es la que utilizamos para abrir los micrófonos, para dar paso a las emisoras, para meter las sintonías… Pues se bloqueó y nosotros no lo sabíamos. A pesar de que cuando nos encienden el micro se nos enciende una luz en la mesa, como todo el mundo poco más o menos sabe por haberlo visto en la tele, la luz estaba apagada pero todos los micros estaban abiertos porque la mesa se había bloqueado. Teníamos que meter los 50 segundos grabados de los deportes y mi compañero Juan Vicente, al darle al play, no sonaba nada, por lo que en la confianza de que teníamos el micro cerrado empezamos a decir: no se oye nada, y yo… Pero Juanvi, ¿qué has hecho? ¡Es que me lo sé de memoria porque lo he escuchado tantas veces! ¡Se ha jodido la mesa! ¡No se oye nada! ¡No jodas! Salgo corriendo… Y empiezan a venir compañeros de la redacción diciéndonos que nos calláramos porque se estaba oyendo todo…

¡Carne de zapping!

Sí, sí… Una amiga mía, que vive en Madrid, iba a entrar en el Metro una mañana y lo escuchó en «Anda ya», en Los 40 Principales. Claro, imagínate… Una juerga alrededor de la anécdota… ¡Porque ellos lo teatralizaron! Daban para adelante, para atrás… ¡Como un auténtico zapping de la televisión! Estuvo gracioso. Luego, otro compañero de Toledo, Óscar García, tuvo la paciencia y el humor de hacer un reggaeton con el momento. ¡Con el «no me jodas»! Nos hizo una foto a Juan Vicente y a mí, buscó una base techno y era como un auténtico reggaeton. Creo que todavía lo tengo guardado. ¡Fascinante!

¿La Pandorga de Ciudad Real o el Corpus Christi de Toledo?

Ahora el Corpus.

Alguien se va a enfadar…

No, vamos a ver. Llevo viviendo la Pandorga desde que tenía siete años, porque mis hermanas son mayores que yo y cuando salían con su peña y su grupo me llevaban a todas partes con mi pañuelito, mi camisetita blanca… Son cosas muy distintas, no se puede comparar. Pero reconozco que en la Pandorga te lo pasas muy bien y aprovecho para ver a mi gente de Ciudad Real, siempre he salido en el desfile de la Virgen con el traje tradicional, ahora salen mis sobrinas para mi orgullo, pero tengo que reconocer que, estéticamente, la grandeza que tiene el Corpus, la gente que atrae y el marco de Toledo no lo tiene Ciudad Real. Pero bueno, sin que se me enfaden mis paisanos.

Sin Twitter, ¿qué sería de Cristina López Huerta?

Pues Twitter es una red social a la que voy y vengo, no soy excesivamente fiel, lo soy más a Facebook porque me expreso más como yo soy, con Twitter ehhhhh… Nunca puedes olvidar quién eres y dónde trabajas, y hay veces que también… No es que te tengas que morder la lengua, pero intento separar mucho mi opinión personal de… En Twitter hablo más de cuestiones como críticas de televisión, de películas, cosas de libros o noticias generales nacionales y, profesionalmente, para publicitar noticias que nosotros generamos en la SER, pero Twitter es algo que, ya te digo, me engancha y me desengancha a partes iguales.

Usted, en Twitter, dijo: «Si las de Femen fueran lo que dicen, no usarían las tetas para llamar la atención. Carne de Interviú. #Así no».

Sí. Lo mantengo. ¿Por qué lo pienso? Me parecen muy loables las causas por las que ellas luchan, pero en el fondo se promocionan con algo que ellas critican.

¿Por qué dijo también en la citada red social que se había equivocado con CR7? Hablamos de Cristiano Ronaldo, por si alguien no se ha enterado. ¿Es que antes pensaba que era un chulo y ahora cree que ya no lo es?

Sí, más o menos. Me ha ido conquistando, aparte de porque creo que ahora mismo es el mejor jugador que hay, que me perdonen los barcelonistas y los atléticos, que tenéis a Diego Costa muy fuerte, porque, efectivamente, cuando llegó yo pensaba que era el típico ególatra y un poquito chulo. Y, realmente, por la forma de contestar a los periodistas, que a veces no es fácil, que a veces también el mundillo de la prensa deportiva es un poco complicado, un poco rascar noticias de donde no existe, y estábamos acostumbrados al futbolista de «sí, bueno, no» y me quedo ahí, y creo que es una persona que aparte de que se defiende en varios idiomas, que para mí es una envidia, lo tengo que reconocer, me gusta cómo habla, las cosas que dice y en el campo pues… Habla solo.

¿Es usted teleadicta o serieadicta?

Pues yo antes era muy teleadicta porque me crié viendo la televisión. O sea… ¡Básicamente! Como en casa no tenía con quién jugar, pues me ponía la tele… Mi madre siempre me decía: niña, la tele, la tele… Te voy a contar una anécdota curiosa. Teníamos una tele de ésas de los años 80, con la caja de madera, entonces mi padre llegaba a casa, tocaba la tele y decía: Cristina, la tenemos que apagar, que está caliente. Y yo: ¡No, no… Un poquito más! Es cierto que me gusta mucho la televisión porque… A lo mejor no la que hay ahora, quizás se ha perdido la esencia de los buenos programas, los concursos, de la televisión en familia, porque creo que los horarios están pensados no sé para quién, porque que los late night empiecen a las 22.45… Eso es inviable. Ahora soy más serieadicta y es verdad que si no lo puedo seguir en tiempo real por mis horarios laborales, luego me engancho por internet.

¿Sus series favoritas?

Me gusta mucho la ficción española, aunque una amiga se ría mucho por aquello de ¡ahhh… cine español… las series españolas son malas! Pero yo creo que se hacen cosas bastante decentes, como «Isabel», que me ha gustado mucho; he estado viendo también la estadounidense «Homeland», aunque la tercera temporada flojea bastante; «El tiempo entre costuras» es otro de los descubrimientos de la temporada y es impecable. Me leí el libro de María Dueñas, tuve la oportunidad de conocerla, el libro me gustó mucho y la serie probablemente está superando mis expectativas.

Y creo que aprovecha, cuando hay famosos cerca, para pedir autógrafos, para que le dediquen libros… Vamos, que es un poco mitómana.

Eso surgió esta semana… Tuvimos en la SER a Eloy Moreno, no le conocía, di con él de casualidad porque una amiga me recomendó el libro y me dijo que me iba a gustar y tenía razón, me gustó. Supimos que venía a Toledo porque la segunda novela estaba totalmente inspirada por la ciudad. Tenía ilusión por conocerle. Me leí el libro entero en una tarde, en cinco horas, me salté las clases de inglés… Al día siguiente vino a la radio y le hicimos una entrevista muy bonita, sobre todo desde el conocimiento, porque a veces se nos acusa a los periodistas de hablar de lo que no sabemos, de… Pero es imposible, nos llegan libros todas las semanas.

¿Algún autógrafo que ha pedido a…?

¡Vamos a ver! Mi historia con los autógrafos comienza con Julen Guerrero. ¡Negaré haber dicho esto, pero sé que lo vas a poner! Yo era… ¡Estaba totalmente enamorada de Julen! Siempre he sido superfutbolera y me pilló con el típico pavo este de los 12 o 13 años, le mandé cartas al Athletic de Bilbao, busqué su dirección en Portugalete, le envié cartas, no me contestaba…

Hasta que un buen día…

Hasta que un día llegué del colegio y mi madre me dice: tienes ahí una carta. Pues bueno, pensé, por aquella época yo me escribía con mucha gente de campamentos y cosas así… ¡Y de repente veo un sobre tamaño cuartilla con el escudo del Athletic de Bilbao! Creo que tuvieron que llamar al 112 de la taquicardia que… Porque fue realmente… Y cuando abrí el sobre era una fotografía suya firmada que dice: «Con cariño para mi amiga Cristina de Julen Guerrero». La tengo enmarcada en mi habitación, en Ciudad Real, y… Luego después, tantas cartas debí mandar que… ¡Me llegó otra, también de Julen Guerrero! Ja, ja, ja… Pero esta vez era una carta tipo, como de ordenador, que luego él firmaba. Pero las tengo guardadas con mucho cariño. Pero no te creas que soy muy mitómana, sobre todo porque soy muy vergonzosa. Mucho. Yo esto de ver a un famoso, acercarme y hacerme la foto… ¡No me vas a ver!

¿Se puede saber a quién votó en las últimas elecciones generales?

Sí. Voté en blanco.

¿Y en las elecciones autonómicas y municipales?

Ehhhhh… No te lo voy a decir. Ahí sí voté.

Entonces, tal y como escribió en Twitter hace muy poco, ¿sigue pensando en meter un cromo de las Monster High en el sobre a la hora de votar?

A día de hoy, sí. Tienen todavía dos años para convencerme. Hombre, las próximas son las europeas. No te descubro nada, con todos mis respetos a los eurodiputados, que además ganan mucho dinero, si te digo que son un poco la maría de la política. Las siguientes con las municipales y las autonómicas y yo, sinceramente, las pongo en el mismo nivel que las nacionales… ¿Que dónde metería el cromo? Sobre todo lo digo por las nacionales, en las otras me lo voy a pensar.

Dijo Nacho Villa, director general de Radiotelevisión Castilla-La Mancha, que la información que realizaron del crimen de Cifuentes (Guadalajara), con la famosa máquina de picar carne y los cuchillos, fue impecable. Y usted escribió en las redes sociales: «Alucina, vecina».

¡Alucina, vecina! No lo comparto para nada. Y él lo sabe. De hecho, en un tema como éste, donde todos nos rasgamos las vestiduras e intentamos ser más papistas que el Papa, yo creo que un medio de comunicación tiene mucha más responsabilidad de la que parece. Y si es un medio público, toda. Entonces… Realmente no sé qué quisieron buscar con eso. Seguí mucho esos días la información, tanto cuando pasó el crimen de Cifuentes como la que se originó después, la polvareda, y creo que una disculpa a tiempo hubiera evitado muchas cosas.

¿A los periodistas les manipulan o se dejan manipular? ¡Ojo, también los hay que nunca se dejarán!

Ninguna de las dos cosas y las dos. Me explico. Evidentemente, no trabajamos en una isla, sino contando cosas relacionadas con Gobiernos, con administraciones, con grupos de presión… De todo, ¿no? Y cada uno  quiere arrimar el ascua a su sardina. No es que te manipulen, pero sí que, evidentemente, intentan influenciarte. Si no consiguen influenciarte, ehhhhh… No es que te dificulten el trabajo, pero tampoco te lo facilitan.

¿Ha tenido que dar, alguna vez, una información que usted no quería dar?

Que yo recuerde, no.

Y… ¿Le han quitado alguna que sí quería dar?

No. Nunca.

¿Se ha sentido presionada alguna vez?

No. Editorialmente, no. Es verdad que se pueden tener diferencias de criterio con respecto a algunos asuntos, a lo mejor yo iría más a la carga con esto o aquello me parece más liviano, pero… No, afortunadamente no.

¿El periodismo es una profesión de miserias?

Un poco sí. Las primeras miserias, las nuestras. Y son las que menos contamos. Yo, cuando… Lo sigo haciendo, por mi horario ahora menos, pero he seguido mucho, mucho, mucho, lo que es el ámbito de la economía, política regional pero también economía, como el paro, los sindicatos… He vivido durante mucho tiempo acostumbrada a contar, cuando no había crisis, convenios que no se cierran, subidas salariales que no se consiguen, que queremos trabajar equis horas… Poco a poco eso se dejó atrás y es una minucia, porque ahora hablamos directamente de Expedientes de Regulación de Empleo, de empresas que se cierran… Yo he tenido siempre muy cerca el drama de trabajar en el periodismo. Así te lo digo. A veces es un drama. Cuando los mileuristas se quejaban, nos quejábamos de que éramos un poco lo último de la sociedad ahora casi nos podemos sentir medio burgueses alrededor de lo que hay cerca de nosotros. En Toledo sabes que han cerrado muchos medios de comunicación, otros se mantienen nadie sabe cómo… Es un poco de miseria, sí.

Me cuentan que es muy exigente con usted misma y, sobre todo, muy perfeccionista.

Sí, mucho. Soy muy crítica conmigo misma y… Una vez me dijo una compañera que soy mi peor enemiga.

¿Me tengo que creer lo del EGM (Estudio General de Medios) cada vez que sale? Porque cada emisora da unas cifras, nunca coinciden, todas ganan, ninguna pierde… ¡Vaya lío!

Cierto, cierto… Yo, el EGM llevo muchos años que lo comparo con algunas elecciones. Todos ganan y ninguno pierde, ¿no? Unos ganan porque han ganado votos, otros ganan porque pactan y consiguen gobernar, otros ganan porque son los que más votos han subido pero no han ganado nada… Con el EGM pasa algo parecido.

¿Casaría a dos personas del mismo sexo?

Por supuesto. Y sería un honor.

¿Messi o Cristiano Ronaldo?

Cristiano Ronaldo. ¿Que si soy sincera? Sí. A día de hoy está mejor Cristiano.

¿Y a día de ayer?

Hummmmmmmm… Son muy buenos los dos, pero realmente es verdad que Messi tiene un ángel especial.

¿Diego Costa no es mejor que ellos dos?

Lo he visto poco, porque como partidos del Atleti veo menos… También está hecho una fiera.

¿Tiene algún parado en su familia o entre sus amigos? ¿Ha podido hacer algo por ellos?

En mi familia no, pero amigos muchos. Y te imaginarás, ¿no? Gente licenciada, con carreras, con master, con idiomas, muchos se han tenido que ir fuera, yo ya conozco eso de la emigración y no porque seamos muy aventureros, como dijo una secretaria de Estado, sino porque aquí no hay trabajo. Y hacer por ellos… Pues lamentablemente no ha habido mucho que haya estado en mis manos, pero muchas veces sí he intentado ayudarles con lo único que tengo, que es darles voz y contar su caso, a veces sí les he entrevistado y he hecho algún reportaje con ellos.

Si fuera jueza, policía, banquera, abogada, cerrajera, funcionaria de Justicia… ¿Intervendría en un desahucio u objetaría?

Si pudiera objetar, lo haría. No sé hasta qué punto me ampara la ley, pero intentaría hacerlo.

¿Cuál ha sido su mayor locura por amor?

¡Uffff…!

¿Tantas locuras hay?

No, no… Suelo ser bastante prudente, pero te voy a decir… Hummm… Voy a ponerlo un poco por pasiva. Yo creo que la mayor locura que se puede hacer por amor es no quererse lo suficiente. Eso es una locura y no suele acabar bien. Cuando tienes una relación y quieres más a la otra persona que a ti misma… ¡Eso es la mayor locura del mundo! A la larga es malo. Fíjate, el otro día, y cuadra un poco con este tema, la verdad, escuchaba a Jordi Évole cuando le decía a los compañeros de Canal Nou en la gala de los Onda que no sirve de nada callarse, que al final si te quieren dar la patada te la van a dar igual, pues yo creo que en el amor pasa un poco eso.

¿Cuántos idiomas habla?

Uno y medio. El medio es el inglés.

Si mañana le tocara la lotería…

Pues… ¡Seguro que esa noche no dormiría! Y después haría una especie de lista de Reyes Magos con caprichos y cosas que mis seres queridos quisieran tener. El resto, como siempre he sido muy hormiguita, lo he heredado de mi familia, pues seguramente lo dedicaría al ahorro. ¿Un capricho para mí? No sé, algún gadget tecnológico o ropa, seguro.

Si fuera presidenta del Gobierno de España, lo primero que haría sería…

Llamar a los presidentes de entidades financieras, dar un puñetazo en la mesa y decirles que ya está bien.

¿Existen los extraterrestres?

Pues no lo sé, pero te voy a contar otra anécdota un poco friki. Hubo una vez con una amiga… Yo estudiaba por las noches y escuchaba mucho «Milenio 3», de Íker Jiménez, y estuve en una «quedada OVNI» en el Campo de las Naciones, en Madrid, que nos juntamos como 2.000 ó 3.000 personas mirando al cielo a ver si veíamos algo. Entre la tortícolis y las estrellas fugaces… La sugestión. Pero yo soy de las que piensa que no estamos solos.

¿Vio algo esa noche?

Yo creo que no. Era más el dolor de cuello… No… Yo no llegué a ver nada, fui allí con más frío que en toda mi vida… ¡Pero yo creo que no estamos solos! También te lo digo. Algo hay, algo hay…

¿Por cuál de estas situaciones pasaría para ganarse la vida? Uno, posar en top-less o hacer un desnudo integral para una revista; dos, posar para el calendario Pirelli; o tres, atender un teléfono erótico.

Vale. La primera no, solo porque no soportaría que mi madre me viera. La segunda no sólo no sería un trabajo forzado, sino que para mí sería un placer y un honor que me hicieran… Bueno, bueno, bueno… ¡Por favor, aunque fuera un calendario de bolsillo! Y la tercera la haría sin problema. ¡Cualquiera de las dos! La del calendario Pirelli o la del teléfono erótico.

¿Sin problemas en el teléfono erótico? ¡Pero si me ha contado que es tímida!

¡Pero no me ven! Y además, te voy a decir, ya estoy acostumbrada a grabar cuñas de discotecas así… (Y Cristina pone voz para la ocasión). De sesiones así… Eróticas…

¿Actuaría en una película porno?

No. No me veo capacitada para una película porno. Ja, ja, ja…

¿Debería abdicar el Rey ya en el Príncipe?

A ver… Yo creo que el Rey, más que abdicar en el Príncipe, lo que tiene que hacer es solucionar el problema que tiene en casa, que no es pequeño, con su hija y con su yerno. Eso es lo primero que tiene que hacer. ¡Y él sabrá cómo! Luego ya… Los españoles somos pacientes.

¿Se ha pegado con alguien alguna vez?

Hummmmmmm… ¡Algún tortazo he dado!

¿De pequeñita?

¡Y de mayorcita! Ja, ja, ja… Pues es que… Si te digo la verdad, no sé por qué motivo fue, pero creo que me debió sacar de quicio alguien y le di un tortazo. A una persona del género opuesto.

¿Un tortazo de estos que se pegan con la mano abierta?

Ja, ja, ja… ¡Con la mano abierta! ¡A un chico!

¿Por una cuestión de amor?

Sí, sí, sí… ¡Iban por ahí los tiros! Ja, ja, ja…

¿Un exnovio?

Un exnovio.

Se comió el tortazo con patatas fritas y…

Perfectamente. Me dio la razón en mi enfado, ¿eh? Te lo tengo que decir. Lo cual, he de decir, ¡no justifico la violencia! ¿eh? Ja, ja, ja… ¡Fue un arrebato y no he tenido más!

¿Ha recibido propuestas sexuales de una persona de su mismo sexo?

Pues una vez, en un bar, se me acercó una chica y me preguntó: ¿Eres hetero? Y le dije: Sí. Y me respondió: Pues si te lo piensas, llámame.

¿Le llamó?

No, ¡nunca la volví a ver! Ja, ja, ja… No, no, no, no… ¡No dejó dirección, no dejó datos! Ja, ja, ja… Fue en el Círculo del Arte, en Toledo, hace ya unos cuantos años. Oye, te voy a decir una cosa, ¡un honor!

¿Se atreve a decir el lugar más raro donde ha practicado sexo?

¡Ésa es la única respuesta que me he traído preparada! Ja, ja, ja… Sitio no, pero te voy a decir algo con lo que creo que mucha gente se va a sentir identificada: la adolescencia es muy mala y… Ja, ja, ja… La falta de recursos agudiza el ingenio. ¡No te digo más!

¿Ni una pista?

Bueno, yo creo que en el fondo… ¡Los convencionalismos de todo el mundo! Pero la verdad es que cuando miro atrás y pienso en algunos de esos sitios… ¡Me echo las manos un poco a la cabeza! Ja, ja, ja… ¡Pero no te voy a decir ningún sitio! Que piensen, que piensen… Ja, ja, ja…

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