Castilla-La Mancha recupera nueve años después su Ley de la Viña y el Vino, con el objetivo de proteger el sector e impulsar su crecimiento. Será el próximo 28 de julio, cuando se apruebe en las Cortes regionales.
Una «noticia excelente» que, según ha destacado el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, permitirá incorporar nuevos modelos de negocio, así como garantizar la trazabilidad y calidad del vino manchego.
“Vamos a recuperar una ley que nunca debimos perder. Nuestra región cuenta con la mayor superficie de viñedo del mundo, somos la bodega del mundo y, por tanto, necesitábamos tener una ley del vino a la altura de lo que representa Castilla-La Mancha en este sector”, ha celebrado el consejero.
Martínez Arroyo valora positivamente la reducción de los trasvases
Ha sido durante el desayuno informativo organizado en Albacete por La Tribuna y el Banco Santander, donde ha aprovechado para valorar la última decisión adoptada por el Secretario de Estado de Medio Ambiente respecto al trasvase Tajo-Segura.
En este sentido, Martínez Arroyo ha celebrado que se haya rechazado la petición de la Comisión de Explotación y se haya decidido reducir de 20 a 13 hectómetros cúbicos la cantidad de agua que se trasvasará durante el mes de julio.
Pide que solo se envíe agua para consumo humano
“Es una buena noticia para Castilla-La Mancha que se trasvase menos hectómetros cúbicos que los que proponía la Comisión de Explotación”, ha indicado, no obstante, ha reiterado la necesidad de reducir “al máximo” los trasvases. “Pedimos que se envíe agua solamente cuando sea necesaria para consumo humano”.
Aun así, el consejero ha calificado la decisión de «valiente». «Hubo épocas no muy lejanas en las que el ejecutivo central autorizaba directamente las cantidades que proponía la comisión, esto, por suerte, ya no sucede», ha concluido.