El párroco de la localidad albaceteña de San Pedro ha cargado contra el colectivo LGTBI y el matrimonio homosexual y pide a sus feligreses que se mantengan «radicales» al Evangelio y que no se vean obligados a «aceptar su estilo de vida».
Lo hizo durante la homilía del pasado 14 de agosto, en la cual aseguró que las personas homosexuales «no eran normales« «ni queridas por Dios».
«Las parejas del mismo sexo se han vuelto algo común, pero que sea habitual no quiere decir que sea normal, son libres, pero eso no significa que tengan que ser aceptados. Se valora a la persona, no se juzga ni se acusa, pero su forma de vivir no estamos obligados a aceptarla», afirma en su discurso.
Asegura que la ideología de género fomenta la pedofilia
Asimismo, rechaza la ideología de género y el lenguaje inclusivo, al que acusa de ser «contradictorio» y «excluyente», además de «peligroso», ya que, según el presbítero, fomenta la pedofilia.
«Promueve unas ideas que borran la línea que hay entre el niño y el adulto para llegar a decir que no existe niño ni adulto, sino que todos somos lo que somos, por lo tanto los que hoy son catalogados como pedófilos ya no estarían cometiendo un delito ni una gravedad psicológica, sino que sería una identificación sexual, por tanto, el varón tiene derecho y el niño está en su deber de asumir una relación con el adulto», esgrime.
Vecinos y asociaciones rechazan lo ocurrido
Unas declaraciones que rápidamente se han difundido entre los vecinos y el tejido asociativo del municipio y la provincia, que considera el sermón como un «grave ataque a la convivencia».
«Relacionó que desde las asociaciones y los movimientos por la igualdad estamos luchando también para que se reconozca algo tan perverso como es la pedofilia, arrojó estas acusaciones de manera totalmente gratuita, jugando con la estrategia del miedo«, ha lamentado Álvaro Cuenca, miembro de la asociación Quorum Plus CLM.
Agrava el «sexilio rural»
Declaraciones que, además, al pronunciarse en un municipio de poca población tienen mucho más calado. «Te están diciendo directamente que no eres válido y que tus vecinos no tienen ni que aceptarte, estás radicalizando la discriminación de las personas, eso en un pueblo tan pequeño es muy grave«, explica.
Del mismo lado, Araceli Castillo, también integrante del colectivo, ha criticado lo ocurrido. «Está aprovechando su posición como párroco para lanzar un discurso lleno de odio, está insinuando que la comunidad LGTBI fomenta la pederastia y no respeta la edad infantil, cuando es la Iglesia la que ya tiene casos condenados y denunciados».
Igualmente, desde Quorum, junto con otras entidades y partidos políticos, han lanzado un comunicado rechazando las declaraciones del párroco e instando a las instituciones a pronunciarse «sobre un caso tan grave que afecta a la convivencia y a la dignidad de toda una comunidad y sus familiares».
El Ayuntamiento de San Pedro condena las declaraciones
Por su parte, el alcalde de la localidad, Daniel Sancha, también ha condenado lo ocurrido y ha desvinculado al pueblo de dicho comportamiento homófobo. «No compartimos las palabras de la homilía, no entendemos este tipo de actitudes en el pueblo, somos un pueblo moderno, activista, donde se respetan y defienden los derechos de todas las personas, nos ha sorprendido lo ocurrido y así se lo trasladé al cura», ha explicado.
«En San Pedro celebramos la semana del Orgullo, tenemos la bandera arcoíris puesta en el balcón del Ayuntamiento casi todo el año, además, ambas formaciones oficiamos muchas bodas de matrimonios homosexuales, lo que ha ocurrido es totalmente desagradable y lo condenamos«.
Por el momento, el párroco no se ha pronunciado ni se ha puesto en contacto con el colectivo afectado.