La compañía Iberdrola ha asegurado que la torre de media tensión que habría provocado una descarga eléctrica mortal a un niño de 12 años el pasado sábado en Gálvez (Toledo) estaba en perfecto estado y tiene «todas las medidas de protección».
Fuentes de Iberdrola consultadas por Efe han indicado que tras conocer el suceso, ocurrido la noche del pasado sábado, técnicos de la compañía eléctrica se desplazaron al lugar y examinar la torreta sin que hayan encontrado «nada extraño» ni ningún problema en el sistema de protección de la torreta.
Además, tampoco han encontrado que hubiera ningún enganche ilegal de suministro eléctrico a esta instalación, situada detrás del cementerio de Gálvez, en el camino a Totanés, donde ocurrió el suceso y donde estaría acampada la familia de temporeros portugueses.
Iberdrola va a facilitar a la Guardia Civil toda la información que precise para tratar de esclarecer las circunstancias de la electrocución del menor, que murió cuando trataban de reanimarle en el centro de salud de Menasalbas, adonde fue evacuado por los servicios sanitarios que acudieron con una UVI al lugar.
El juzgado de primera instancia e instrucción numero 4 de Toledo, que estaba de guardia el fin de semana, ha abierto diligencias previas de investigación para tratar de esclarecer las circunstancias de esta electrocución.
Al parecer, según han indicado a Efe fuentes cercanas a la investigación, el suceso se habría producido cuando el fallecido se encontraba con un hermano, también menor, aunque algo más mayor que el fallecido, por lo que esperan que su testimonio pueda arrojar alguna luz sobre las circunstancias del hecho.
La Policía Judicial de la Guardia Civil ha abierto una investigación para tratar de aclarar lo sucedido con el menor, al que hoy está previsto se le practique la autopsia.